BARCELONA, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Relaciones Institucionales y Participación de la Generalitat, Joan Saura, acusó hoy a CiU de incurrir en técnicas de "filibusterismo" parlamentario para evitar que se acaben aprobando diferentes proyectos de ley impulsados por el Gobierno y que previsiblemente decaerán al finalizar la legislatura por la ausencia de mayoría parlamentaria para su aprobación.
Saura sostuvo que CiU actúa movida por "electoralismo partidista para evitar que lo que no han hecho en 24 años ahora lo haga otro gobierno", mientras desde CiU Felip Puig lamentó que el actual Ejecutivo esté situado en "el nirvana" y haya tomado una "deriva totalitaria" prescindiendo de la "necesaria legitimidad democrática" para aprobar sus proyectos.
El enfrentamiento entre Saura y Puig se enmarcó en una interpelación del portavoz de CiU al Gobierno sobre la "interinidad del Gobierno hasta las próximas elecciones" y que estuvo cargada de ataques al antiguo gobierno tripartito por su intento de "destrucción" de la obra de gobierno heredada de la federación nacionalista e incluso de "borrar la memoria del país" con "finalidades partidistas".
Puig insistió en la necesidad de acabar la legislatura "cuanto antes" y se vio incapacitado para resistir "seis meses con esta frivolidad y pasotismo" desde el Gobierno. El portavoz nacionalista recordó al Ejecutivo catalán que a día de hoy "no tienen mayoría parlamentaria, ni capacidad de respuesta, ni legitimidad social, ni autoridad y liderazgo" y denunció que algunos consellers "actúen como miembros de la comunidad de vecinos de 'Aquí no hay quien viva' desoyendo resoluciones del Parlament.
Según Puig, CiU está dispuesta a apoyar los proyectos de ley de conciliación de la vida laboral y familiar de los funcionarios de la Generaltiat y el proyecto de ley de prestaciones económicas de asistencia social, pero descartó que PSC e ICV cuenten con los votos de los nacionalistas para aprobar leyes como la de derecho a la vivienda, que pretenden aprobar pese a no contar con el beneplácito de ERC, antiguo socio de gobierno.
También anunció que cuestionarán en el parlament la aprobación del mapa de la Red Natura 2000, el plan de infraestructuras de transporte, el plan de turismo, o que se ejecute la venta de Al-pi.
Saura se olvidó de los republicanos y atribuyó a CiU la única responsabilidad de que determinadas leyes no se aprueben en los meses que restan de legislatura antes de las elecciones autonómicas anticipadas.
Según el conseller, los nacionalistas "utilizan intereses generales del país para negar medidas sociales" por intereses "electorales y partidismo" y reclamó a CiU que "no intente aprovecharse de una situación coyuntural" para paralizar la aprobación de leyes a las que el Ejecutivo da prioridad, como es el caso de la ley de vivienda, aunque citó hasta una docena de proyectos de ley actualmente en trámite parlamentario.
Al margen de los proyectos legislativos, Saura defendió las funciones del Gobierno hasta la convocatoria de elecciones comenzando por la tarea de garantizar la celebración del referéndum del Estatut el próximo día 18 de junio. En este sentido, reprochó también a CiU la ausencia de una manifestación "clara y potente" defendiendo el derecho del Gobierno a fomentar la particiapción.
