TERUEL, 18 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, aseguró hoy en Teruel, en relación al Decreto-Ley de medidas excepcionales y urgentes para la conducción de agua de Tarragona a Barcelona, que "por lo que conozco de la propuesta no hay afecciones a la Cuenca del Ebro y por tanto, no hay trasvases desde la Cuenca del Ebro".
Según el presidente aragonés, "si no hay novedad introducida en el Consejo de Ministros, no tendría efectos sobre la Cuenca del Ebro". De ahí, señaló Iglesias "que no sea necesario reunir el Consejo de la Cuenca del Agua, ni los planteamientos de la Confederación porque se resuelve fuera de la propia Cuenca del Ebro".
A juicio de Iglesias, "se redistribuyen los caudales de cuatro metros cúbicos por segundo que estaban asignados desde el año 1981", en referencia a los recursos que tienen concedidos las cuencas internas de Barcelona desde esa fecha.
Iglesias también se refirió a la postura de los presidentes de Valencia y Murcia, Francisco Camps y Ramón Luis Valcárcel, respectivamente, de trasladar este asunto al Tribunal Constitucional, Marcelino Iglesias apuntó que "entiendo que ellos apoyan esta solución, pero insisten en el planteamiento del viejo trasvase del Ebro que quedó derogado". Agregó que "nosotros no somos partidarios de los trasvases y si se producen, nosotros aplicaríamos el Estatuto de Autonomía de Aragón".
En este sentido, el presidente del Ejecutivo aragonés aseguró que "lo que se plantea ahora no es un trasvase porque no se incrementan las dotaciones que tienen las Cuencas internas de Barcelona, en un solo litro". Además, añadió que "es una solución temporal, por nueve meses como máximo, con una capacidad de transporte exclusiva de lo que estaba ya concedido en las cuencas internas de Catalunya".
Por otro lado, Marcelino Iglesias respondió a las críticas del vicepresidente del Gobierno de Aragón, José Ángel Biel quien aseguró que la reunión que celebrará mañana la ministra de Medio Ambiente, Rural y Marino, Elena Espinosa con los consejeros autonómicos para explicar la solución adoptada llegaba tarde. Iglesias afirmó que "si se tocaba la Cuenca del Ebro llega tarde, pero lo que a mí me han asegurado que no se toca. Es una reunión para explicar precisamente que no se toca".
