Sobre la marcha de Bono, señaló que lo importante "no es quien se va, sino quien se queda" MADRID, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, afirmó hoy que "los verdaderos derechos" en los que se basa la autonomía actual del País Vasco y del propio cargo de lehendakari son "tan históricos como del 78" y recordó que si hay un Gobierno vasco con mayor autonomía que nunca es gracias a la Constitución española.
Así se pronunció en declaraciones a TVE recogidas por Europa Press al ser preguntado por el discurso de ayer del lehendakari Juan José Ibarretxe, donde dijo que "la única Constitución del pueblo vasco es la Constitución formada por los derechos históricos del pueblo vasco que ampara y respeta los textos constitucionales".
"Lo que da la democracia al País Vasco, lo que hace que haya un Gobierno vasco con el mayor nivel de autonomía que han tenido a lo largo de toda su historia, lo que hace que el señor Ibarretxe sea lehendakari de los vascos es la Constitución del 78, por lo tanto, los verdaderos derechos en los que se fundamenta la autonomía actual del País Vasco y del propio cargo de lehendakari son tan históricos como del 78", señaló.
Por otra parte, interpretó que cuando el lehendakari dice que la violencia se ha acabado para siempre en Euskadi está expresando "de momento el deseo de todos los vascos y vascas, de todos los españoles y españolas de que se acabe ya de una vez algo que quizá nunca debió empezar". El ministro pidió actuar con "prudencia" aunque admitió que se está "por el buen camino".
LA MARCHA DE BONO
Preguntado por la marcha de José Bono del Gobierno, Sevilla subrayó que "lo importante en estas circunstancias no es quien se va sino quien se queda". En este sentido, afirmó que "lo que se queda" es "un gobierno que todavía tiene dos años por delante para seguir haciendo muchas cosas, para transformar y mejorar España y la vida de los españoles".
Al ser cuestionado sobre si se puede atisbar en el horizonte un nuevo cambio de Gobierno para presentar candidatos a las elecciones autonómicas, respondió que él no lo sabía "porque esas cosas las decide el presidente del Gobierno", explicó. "Por lo menos a mí no suele consultarlo y me da la impresión, por lo que hemos visto, que tampoco lo consulta mucho y que toma sus propias decisiones y nos sorprende gratamente", añadió en alusión al secretismo con el que se llevó el relevo de Bono por José Antonio Alonso y la entrada de Alfredo Pérez Rubalcaba en Interior.
El ministro valoró los dos años de gobierno que cumple hoy el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero como la continuación de la "gestión de la economía" que hizo el PP --algo que la gente coincidía en admitir que hacían bien, dijo-- junto a una mejora de los derechos sociales. "La gestión de la economía con el gobierno de Zapatero se hace igual o mejor y además hemos avanzado mucho en derechos sociales", afirmó.
ESTATUT
No obstante, Sevilla admitió que si ha fallado algo en el Estatut es que aún no se ha cogido "la perspectiva suficiente". "Los que hoy valoran positivamente la Transición, la elaboración de la Constitución, el actual Estatuto de Cataluña a veces se olvidan de que cuando se discutió, cuando se debatió, ellos estaban en contra. Incluso el PP se abstuvo con el actual Estatuto de Cataluña y con el tiempo, como que le ha cogido cariño", dijo.
Preguntado si la reforma del Estatuto andaluz generará tanta controversia como el catalán, contestó que "nunca se sabe". "Dependerá de si el Partido Popular cree que ahí puede o no arramblar algún voto", apuntó y consideró que "esa estrategia de intentar conseguir marcar territorio (...) electoral con todos los asuntos es mala" y esperó que a los 'populares' les entre "un ataque de sensatez" y se sienten "a hablar y a negociar".
Criticó también la "confusión" con la que el PP ha abordado las reformas estatutarias desde el 79, "cuando comenzaron a ponerse en marcha los primeros estatutos de autonomía". "Entonces, el señor Fraga se opuso al término nacionalidad para aplicarse a algunas comunidades autónomas porque entendía que eso era romper España", recordó y señaló que sin embargo "la historia ha demostrado que España es mucho más fuerte de lo que algunos supuestos españoles la consideran".
También denunció la campaña del PP contra el Estatut, cuando este partido "encabezó" la reforma del Estatuto valenciano con "una recuperación de los derechos históricos de la Comunidad Valenciana y con una llamada cláusula Camps en la que dice que cualquier otra cosa que hagan los demás será aplicable a la Comunidad Valenciana". Por tanto, dijo Sevilla, "o no es tan malo lo que se puede aplicar a los demás, en cuyo caso es generalizable o tienen un nivel de irresponsabilidad tan grande que aunque sea malo, lo quiero para mí".
Sobre las críticas que produjo el Estatut en el seno del Partido Socialista, indicó que esas críticas se referían a "la versión que salió del Parlamento de Cataluña".
