SAN SEBASTIÁN, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de Sortu Pernando Barrena ha afirmado que la investigación encargada por el Gobierno vasco sobre torturas "apunta en la dirección de lo que ya se conocía" ya que, con 3.587 denuncias registradas por el momento, se acerca "a las cifras que se han dado de las personas que han podido sufrir torturas por parte de las fuerzas de seguridad del Estado, unas 10.000 desde los años 60".
En una rueda de prensa para dar cuenta de los actos convocados por Sortu para este viernes, cuando se cumplen 34 años de la muerte "por torturas a manos de la policía española del zizurkildarra Joxe Arregi", Barrena ha recordado que esta fecha que se ha convertido "en referencia anual para la denuncia de la práctica de la tortura".
El portavoz de Sortu ha indicado que "este año también, por desgracia", existe la "necesidad de denunciar y volver a movilizarnos contra la práctica de la tortura y contra las medidas de legales de excepción que amparan la existencia de esa lacra".
Según ha informado, el viernes se han organizado diversos actos para la denuncia de esta práctica en distintos puntos de Euskadi y Navarra, como el que tendrá lugar en la plaza del Ayuntamiento de Pamplona a las 19.00 horas. Además, el sábado a las 12.00 horas habrá otro acto en el frontón municipal de Basauri bajo el lema 'Tortura, un instrumento de Estado contra Euskal Herria'.
Barrena ha indicado que Sortu aprovechará esta cita para denunciar que "el Estado ha utilizado la tortura como herramienta política a través de los tiempos y que además lo ha hecho de manera sistemática y con total impunidad".
El portavoz de Sortu ha censurado que "la práctica de la tortura ha sido avalada durante años y años por las principales fuerzas políticas del Estado, las fuerzas de seguridad y las legislaciones de excepción o antiterroristas".
A ello ha añadido que "algunos todavía se permiten poner en duda la existencia de la tortura o intentan limitar esa práctica unos casos aislados".
Preguntado por la investigación sobre torturas encargada por el Gobierno vasco a un equipo liderado por el médico forense Francisco Etxeberria y que en una primera fase ha registrado 3.587 denuncias de tortura, Barrena ha señalado que "es muy pronto todavía para hablar de resultados", a lo que ha añadido que el trabajo realizado supone aunque "una primera aproximación".
Sin embargo ha señalado que la recogida de datos, "que no ha hecho más que empezar", apunta "en la dirección de lo que ya se conocía" y así ha recordado que se estima que habría "10.000 personas afectadas por tortura en Euskal Herria desde los 60".
"NEGACIONISMO"
Barrena ha censurado que entre los "negacionistas de la tortura hay incluso quien dice que es un fenómeno del franquismo, desaparecido con la democracia española". Frente a ello ha asegurado que "los datos dicen también que hay más casos probados en la década del 2000 que en la de los 70".
A su juicio, "para que no se den más casos de tortura, ni de vulneración de derechos durante el periodo de detención, es necesario derogar la legislación de excepción y particularmente la incomunicación que es la que permite que la tortura y los malos tratos campen a sus anchas".
Asimismo, ha instado a que "las fuerzas policiales que se han distinguido por la aplicación de esas medidas y especialmente de la tortura abandonen este país y dejen de suponer una amenaza constante contra la integridad de sus ciudadanos".
