El Supremo estudia la absolución de la mujer que alentó el asesinato de un comerciante por no poner un cartel contra ETA

Actualizado: martes, 7 noviembre 2006 13:33

MADRID, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Sala de lo Penal del Tribunal estudiará mañana la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Navarra del pasado mes de diciembre, en la que acordaba la absolución de María Pilar Rubio, quien cinco meses antes había sido condenada a diez años de prisión por proponer el asesinato del comerciante pamplonés Ángel Berrueta, que cometieron su marido y su hijo.

El tribunal estará compuesto por los magistrados Miguel Colmenero, José Manuel Maza, José Ramón Soriano, Joaquín Delgado García y Juan Ramón Berdugo, quien será ponente de la sentencia que dicten. La acusada fue absuelta por el Tribunal Superior de Justicia de Navarra de la condena por un delito de proposición al asesinato que le impuso la Audiencia Provincial de esa misma comunidad autónoma, al considerar que no provocó el crimen sino que se limitó a "alentar" a los autores, su marido, el policía nacional Valeriano de la Peña, y su hijo, Miguel José de la Peña.

El asesinato tuvo lugar el 13 de marzo de 2004 en Pamplona, dos días después de los atentados del 11-M. El fallecido, miembro de Gurasoak, asociación en favor de los familiares de presos de ETA y de la 'kale borroka' (violencia callejera), se negó a exhibir un cartel contra la organización terrorista en su panadería, tal y como le proponía María Pilar Rubio.

Ésta subió a su piso y, tras comentar lo ocurrido en casa, el policía bajó y disparó al comerciante en cuatro ocasiones y su hijo le asestó una puñalada mortal de necesidad. Ambos fueron condenados por la Audiencia Provincial de Pamplona en junio de 2005 a 20 y 15 años de prisión, respectivamente. A la mujer se le impuso una pena de 10 años de cárcel.

El fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Navarra solicitó la absolución de Pilar Rubio por considerar que el policía nacional y su hijo fueron quienes decidieron asesinar a Berrueta, mientras que la mujer se limitó a alentarles. Según el fiscal, falta el primer requisito que contempla el delito de proposición, como es que la acusada decidiera matar al comerciante.

El alto tribunal navarro acordó por unanimidad absolver a la mujer. No obstante, estableció la prohibición cautelar de que se aproximase a los familiares de la víctima.