El Supremo revisa hoy la condena de la colaboradora de ETA que alegó enamoramiento y otros dos compañeros

MADRID 6 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Sala Segunda del Tribunal Supremo celebra hoy la vista del recurso de casación contra la sentencia de la Audiencia Nacional que condenó Arkaitz Lavega, Iker Beristain y Miren Azkarate a penas de nueve, ocho y cinco años de prisión, respectivamente, por colaboración con la organización terrorista ETA. Los tres recurrieron ante el alto tribunal.

Aunque la sentencia condenó a Miren Azkarate a menos años de prisión que a sus compañeros, rechazó su petición de que se le considerara una atenuante la afectación de su capacidad cognitiva, porque estaba enamorada de su contacto en ETA, Fernando Bert. "El médico-forense no apreció incidencia alguna de la existencia de un amor platónico en relación a la afectación de las capacidades cognitivas o volitivas de la procesada", señalaba la sentencia de la Audiencia.

El tribunal de instancia no aceptó el supuesto trastorno de la acusada y por tanto la aplicación de la atenuante, pero le impuso una pena por colaboración en su mitad inferior, es decir, cinco años de prisión. La sentencia consideraba que no estaba acreditado que la procesada viajara a Francia movida por sus sentimientos y añadía que no habló de ese supuesto amor hasta la vista oral.

En la misma sentencia también fue condenado Iker Beristain, uno de los 54 acusados que desde noviembre del año pasado están siendo juzgados en el macrosumario contra el entorno de ETA, en el que se le acusa de integración en ETA, delito por el que el fiscal pide para él 15 años de prisión. Según el Ministerio Público, fue un miembro liberado de la Koordinadora Abertzale Sozialista (KAS) en la Coordinadora de Alfabetización y Euskaldunización (AEK).

La sentencia de la Audiencia Nacional que ahora revisa el Supremo consideró acreditado que Beristain se entrevistó en octubre de 2001 con un miembro de ETA que le propuso colaborar con la banda terrorista. "Aceptó la propuesta de dicha organización para que realizara labores de auxilio de sus actividades y, en concreto, facilitara nombres de personas potencialmente dispuestas a integrarse en la organización terrorista, concertando un nueva cita para un día posterior", indicaba.

A Beristain le entregaron cuatro sobres para que los hiciera llegar a otras tantas personas de San Sebastián. Una de estas personas resultó ser el ex guardia municipal de la capital guipuzcoana Arkaitz Lavega. En otra cita con miembros de ETA en el sur de Francia, Beristain recibió una lista con nombre de personas a las que debía preguntar si querían colaborar o integrarse en ETA.

El acusado entregó otro de esos sobres a Miren Azkarate, "pues ésta le había manifestado su predisposición a realizar tareas de la banda armada". El 18 de mayo de 2004, la procesada se desplazó al sur de Francia donde contactó con un tal Fernando Bert. Fue llevada con los ojos vendados a un lugar desconocido en la que esta persona le planteó las formas posibles de colaborar con ETA. Azkarate aceptó entregar nombres de personas dispuestas a colaborar con la organización.