El TC niega el amparo a un guardia civil que denunció "sin la mesura suficiente" actuaciones ilegales de sus superiores

MADRID 10 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Tribunal Constitucional ha rechazado conceder el amparo a un guardia civil que denunció una serie de actuaciones "arbitrarias" e "ilegales" por parte de sus superiores, al considerar que realizó las críticas "sin la mesura suficiente" por ser "juicios de valor ciertamente ofensivos". El alto tribunal recuerda que las manifestaciones vertidas contra los integrantes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado están permitidas, pero matiza que éstas se pueden realizar en defensa de sus derechos o intereses profesionales.

La Sala Primera del TC rechaza así la vulneración de los derechos alegados por el guardia civil, a quien se impuso una falta disciplinaria muy grave, al afirmar que los límites del derecho a la libertad de expresión se "han rebasado", puesto que, según apunta, las críticas "tienen como denominador común la imputación a los mandos de la Guardia Civil de actuaciones no sólo arbitrarias, sino también ilegales". Por ello, concluye que "la falta de la necesaria mesura en la crítica es lo que justifica la sanción al agente y no el hecho concreto de la crítica".

El guardia civil, destinado en Soria, fue sancionado por el Director General de la Benemérita al haber filtrado supuestamente a varios medios de comunicación informaciones sobre represalias económicas y disciplinarias a los agentes afiliados al sindicato "Asociación Coproper y 6J contra la gestión de Luis Roldán", de la que el recurrente era delegado provincial en Soria.

Según recoge la sentencia, se le acusó por haber denunciado el deficiente estado de conservación de la casas-cuartel, la ocultación de cobros ilegales de dietas o la arbitrariedad en la concesión del plus de productividad. También se le acusó por haber asegurado que los agentes afiliados eran objeto de "persecución" y de "grabaciones ilegales" por parte de mandos de la Guardia Civil.

Pese a negarse a reconocer que realizó las filtraciones periodísticas, el Ministerio de Defensa, a propuesta de su instructor, impuso al guardia civil una sanción de un año de suspensión de empleo por falta disciplinaria muy grave, que fue confirmada dos años más tarde por la Sala de lo Militar del Tribunal Supremo.

"MESURA NECESARIA"

La sentencia recoge que el guardia civil alegó en su recurso de amparo que las manifestaciones vertidas se realizaron dentro de su "legítimo" derecho a la libertad de expresión como representante de una asociación profesional legítimamente constituida.

En este contexto, el TC precisa que sí están permitidas las críticas de los integrantes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad hacia sus superiores jerárquicos en defensa de sus derechos o intereses profesionales, pero puntualiza que quedan excluidas "aquellas críticas que fuesen realizadas sin la mesura necesaria".

Igualmente, el alto tribunal explica que, en este caso, se emplearon "juicios de valor ciertamente ofensivos hacia sus superiores jerárquicos". De esta manera, afirma que "echan en falta los magistrados la mesura necesaria a la hora de efectuar este tipo de críticas por parte de un guardia civil en su condición de representante sindical".