Tregua.- El ex párroco de Maruri dice que los pasos a seguir en el proceso "han sido impuestos" ya por ETA

MADRID, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -

Jaime Larrinaga, el sacerdote que tuvo que huir de su parroquia en Maruri por amenazas de ETA, habló hoy del alto el fuego permanente y se mostró convencido de que es el resultado de "una negociación" del Gobierno con la banda terrorista. "Han estado negociando desde hace tiempo, todos los pasos están dados y han sido impuestos por ETA", sentenció.

Para Larrinaga, "la negociación estaba acabada desde hace tiempo". De hecho, apuntó, "se esperaba un alto el fuego hacia finales de abril o mayo". Por ello, en su opinión, lo que ha hecho el Gobierno y su presidente, al que acusó de "mentiroso", ha sido "hacer pública esa tregua antes, coincidiendo con la aprobación del Estatuto de Cataluña".

Desde el Ejecutivo, advirtió el sacerdote vasco, "se está vendiendo una mercancía muy peligrosa hablando a la gente de la Paz". "Cuando nos hemos manifestado, pedíamos la libertad, no la Paz. La Paz se pedía en Irlanda, donde había dos bandos, pero es que en España sólo hay un bando, el que mata; los otros sólo son los que ponen los muertos", añadió.

LA PAZ ES UNA "MERCANCÍA PELIGROSA"

Todo lo cual no significa, aclaró, que no se desee la paz. "Todos queremos la Paz y las víctimas del terrorismo son las primeras que quieren la Paz, pero no siguiendo las directrices de los terroristas", subrayó. "Creo que --ante la nueva situación-- los de ETA dirán: 'Merecía la pena los treinta años de asesinatos para llegar a esta situación. ¿Qué dirán entonces los que han sufrido las muertes, la falta de libertad?", se cuestionó.

Para el párroco, lo que el Gobierno debería haber hecho es acabar definitivamente con ETA cuando la banda estuvo "tan débil" hace dos años. "El día en que el Gobierno se puso de rodillas ante ETA contento porque los etarras habían declarado el alto el fuego permanente será recordado en España como un día muy negro", sentenció.