El TS confirma 4 años de prisión para el dueño de un bar por ruidos y ve un posible delito de lesiones a los vecinos

Actualizado: lunes, 7 mayo 2007 19:38

MADRID, 7 May. (EUROPA PRESS) -

El Tribunal Supremo ha confirmado la condena a 4 años de prisión impuesta por la Audiencia Provincial de Barcelona al dueño de un bar por la reiterada emisión de ruidos durante la noche, que provocó a algunos vecinos insomnio, estrés y depresión. A pesar de que se le condena por un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente, el alto tribunal considera "sorprendente" que no se haya tenido en cuenta en este proceso la posible comisión de un delito de lesiones en concurso ideal con el de peligro.

En una sentencia hecha pública hoy, el Supremo desestima el recurso interpuesto por el propietario del establecimiento contra la sentencia de 20 de marzo de 2006 de la Audiencia, que le condenó también a pagar una multa de 8.640 euros y a indemnizar con 16.000 euros a los vecinos afectados, en concepto de daños y perjuicios causados a la salud psíquica e intimidad personal.

El Supremo confirma ahora la condena impuesta al dueño, al considerar que "sabía del peligro generado por la explotación del restaurante para el medio ambiente", así como para "la salud de las personas que resultaron lesionadas" por su acción.

En este sentido, la Sala de lo Penal subraya que, de acuerdo con la jurisprudencia del alto tribunal, "obra con dolo todo el que conociendo el peligro concreto generado por su acción no adopta ningún medida para evitar la realización del tipo".

De hecho, el Ayuntamiento de Barcelona dictó en varias ocasiones órdenes para el cese de la actividad del bar, puesto que carecía de licencia de funcionamiento y de las medidas correctoras necesarias para desarrollar legalmente su actividad.

RIESGO GRAVE PARA LA SALUD.

En cuanto al riesgo para la salud de las personas, el Supremo subraya en su sentencia, de la que ha sido ponente el magistrado Enrique Bacigalupo, que es "público y notorio que una larga exposición a ruidos perturbadores del sueño entraña un riesgo grave y perjuicio para la salud" de quienes lo padecen.

En este sentido, la sentencia de la Audiencia de Barcelona consideró probado que la reiterada emisión de ruidos durante la noche en los domicilios de los vecinos les provocó una continuada situación de insomnio y estrés, que en el caso de una pareja derivó incluso en el desarrollo de un cuadro clínico ansiosos-depresivo.