MADRID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se ha comprometido hoy a que la presidencia española de la UE en el primer semestre de 2010 hará "frente" a la necesaria modernización de la economía europea con el objetivo de que la salida de la crisis económica "sea una realidad en 2010".
En su comparecencia en el Congreso para informar de las conclusiones de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno europeos los pasados 18 y 19 de junio en Bruselas, aseguró que España considera "prioritario hacer frente a los retos estructurales de la Unión Europea y gestionar adecuadamente la recuperación económica" durante su semestre de presidencia.
"Para ello --subrayó-- la renovación de la Estrategia de Lisboa debe ser un elemento clave de confianza para los distintos agentes económicos". La Estrategia de Lisboa es el plan europeo para modernizar la economía europea y aumentar su competitividad.
Zapatero destacó que "tan importante es diseñar una política económica para afrontar la crisis, como la elaboración de una estrategia de salida creíble y efectiva". "El camino debe ser la aceleración de las reformas modernizadoras para mejorar la eficiencia del tejido productivo, profundizar en la creación de un auténtico mercado único europeo y sentar las bases de una recuperación sólida y sostenible", enumeró.
Tras destacar que el Consejo Europeo manifestó su "total apoyo" a la adopción de las medidas necesarias destinadas a garantizar los derechos de los trabajadores y a reforzar la protección y la cohesión social, valoró esta última reunión de los líderes europeos de forma positiva.
ACUERDO "RAZONABLE" SOBRE EL TRATADO DE LISBOA
Así, consideró "razonable" el acuerdo alcanzado para favorecer la ratificación del Tratado de Lisboa por parte de Irlanda con el fin de que este proceso pueda culminar "a finales de este año" y la presidencia española sea así la primera que actúe "en el nuevo marco jurídico", lo que le conferirá "una relevancia y también una singularidad singular".
Zapatero confió en que el pueblo irlandés "sepa valorar" el esfuerzo que han hecho el resto de Estados miembros para favorecer su ratificación del documento y esperó que el pueblo irlandés "se pronuncie mayoritariamente" en favor del Tratado de Lisboa.
Destacó asimismo que el Consejo Europeo ha permitido avanzar en la preparación de la Conferencia sobre cambio climático de Copenhague de diciembre. Aseguró que el Gobierno está trabajando para lograr un acuerdo de "dimensiones históricas" que sería "especialmente relevante y útil" para España, "tanto por la sensibilidad al cambio climático de sectores fundamentales" de su economía "como la agricultura y el turismo" como por la importancia de desarrollar los mercados de las energías renovables, donde las empresas españolas son líderes.
