Usabiaga cree que ha habido "un no proceso" y que se puede retomar si se permite un ciclo nuevo para Euskadi y Navarra

Actualizado: jueves, 5 julio 2007 13:09

Aboga porque ELA y LAB "hagan una catarsis" para ser "un músculo real" para activar un contexto de derecho a decidir y territorialidad

BILBAO, 5 Jul. (EUROPA PRESS) -

El secretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga, consideró que ha ha habido "un no proceso" desde que ETA decretó el alto el fuego permanente y consideró que el Gobierno de Zapatero "no ha cubierto las expectativas" como Ejecutivo. No obstante, dijo que, pese a la actual situación de "ruptura", en el futuro se tienen que "retomar las cosas" desde las baes "de un marco autonómico" que permita a Euskadi y Navarra "hacer un ciclo totalmente nuevo".

Además, abogó porque ELA y LAB "hagan una catarsis" para ser "un músculo real" que permita activar "un nuevo andamiaje político en Euskal Herria basado en el derecho a decidir y la territorialidad".

En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Díez Usabiaga manifestó que "en Euskal Herria han existido y existen muchas personas que han estado o pueden estar con niveles de información bastante importantes de todo lo que ha venido ocurriendo y ocurre" en torno al denominado proceso de paz.

"La gran mayoría de las cosas son públicas, por lo tanto, la gran mayoría de la sociedad tenemos también una percepción de qué es lo que ha ocurrido y qué es lo que, en este momento, había que realizar para encauzar la situación", añadió.

A su juicio, ha sido "un no proceso lo ocurrido en estos casi 16 meses de alto el fuego de marzo por parte de ETA" y hay "muchas responsabilidades a la hora hacer una valoración de lo ocurrido, pero, fundamentalmente, el Gobierno del señor Zapatero no ha cubierto, en absoluto, las expectativas con responsabilidad de Gobierno a la hora de poder llevar adelante lo que puede ser un planteamiento de diálogo, negociación hacia el acuerdo y de compromisos que permitan realmente construir un nuevo escenario".

"El que surjan las cosas, yo creo que tiene su doble vertiente, saber dónde hemos estado, dónde estamos, que se ha hecho un camino, que, en este momento, independientemente de que haya una situación de ruptura no partimos de cero y que en el futuro se tiene que retomar las cosas desde también una etapa, de un nivel de contraste, de planteamientos o propuestas que tienen que ser valiosas para el futuro", añadió.

El dirigente abertzale señaló que "hay un ciclo autonómico que surge en el 77-79, desde la división institucional, desde el no reconocimiento de Euskal Herria como sujeto, el no reconocimiento del derecho a decidir y hay un ciclo autonómico que se tendría que consolidar desde un planteamiento de estructuración institucional de Hego Euskal Herria (Euskadi y Navarra) y desde el reconocimiento permanente que el futuro de este país lo tienen que decidir los hombres y mujeres de este país sin ningún tipo de cortapisas e hipetecas".

"Yo creo que los factores determinantes y los cuales la izquierda abertzale del modelo autonómico del 77-79 estaban pivotados fundamentalmente en esas dos cuestiones: la ruptura que significaba con la territorialidad de Hego Euskal Herria, y especialmente el no reconocer que Euska Herria es un sujeto político, una nación que tiene derecho a decidir".

"Esas dos cuestiones tienen que ser los elementos nucleares, las bases de un marco autonómico que permita luego a Euskal Herria hacer un ciclo político totalmente nuevo. Por lo tanto, no hay ningún elemento contradictorio en decir que la izquierda abertzale plantea un marco autonómico a cuatro, con derecho a decidir, como espacio de consenso, como espacio de encuentro de todas las culturas políticas, de todos los espacios políticos, a partir de los cuales, evidentemente, todos los proyectos tendrían que estar abiertos, incluido el independentista", subrayó.

EL SINDICALISMO ABERTZALE

En su opinión, "se ha perdido una oportunidad porque, cuando ETA declaró el alto el fuego, el sindicalismo abertzale tendría que haber salido a la palestra con fuerza y ser músculo social, con planteamiento, con protagonismo y con capacidad de decidir izquierda y derecha, de condicionar al tablero político".

"No ha sido así y ahora estamos en una situación más complicada de ruptura, de reconstrucción necesaria de lo que debe ser un proceso de diálogo y soluciones", apuntó.

El líder de LAB consideró que "sería importante recuperar ese papel conjunto de actuación, de presencia, de propuesta del sindicalismo abertzale". "Hoy no es fácil predecir cuándo y cómo se puede hacer eso, pero sí que se tiene que empezar a trabajar, a hacer 'praxis' de ese planteamiento", apuntó.

En este sentido, apostó porque su sindicato y ELA "hagan una catarsis en esa dirección, ganar confianza en ese objetivo, y sobre todo, tienen que apostar, con mucha claridad, por esa vía para que una Euskal Herria, en un contexto político, económico y social como éste, en una situación sindical como la que vive, tenga en el sindicalismo abertzale un musculo real para avanzar política y socialmente".

Tras señalar que el ciclo de la llamada "transición española está acabado" y el sindicalismo "tiene que ser trambién parte activa de la activación y estructuración de un nuevo andiamaje político en Euskal Herria, basado, fundamentalmente, en el derecho a decidir y la territorialidad", dijo que "el sindicalismo tiene que ser un factor determinante en políticas y cambios sociales profundos".

Rafa Díez consideró que ELA y LAB deben realizar "reflexiones de alcance para que este tipo de mensajes no sean una música sin letra y partitura, sino que genere una expectativa real". "Nosotros tenemos realmente una voluntad de convertir al sindicalismo abertzale en una parte importante de un proceso de cambio social y político, de una estrategia soberanista y de cambio social. Creemos que eso es necesario y posible y vamos a trabajar en esa orientación", concluyó.