Afirma que defenderá "la legalidad democrática" en lugar de "dar argumentos que la cuestionan, como lo ha hecho" Miren Azkarate
ELGOIBAR (GIPUZKOA), 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PSE-EE y candidato a lehendakari, Patxi López, advirtió hoy a ETA de que "no podrá con las ansias de libertad" del País Vasco que "quiere vivir en paz y está harto de que una banda de matones pretenda tutelar nuestro destino como sociedad". De este modo, aseguró que la paz será "una prioridad en el Gobierno de cambio" que propone para Euskadi y que pondrá "todos los medios e instrumentos del Gobierno vasco" para "acelerar el fin" de la banda terrorista.
López participó hoy junto a la secretaria de organización del PSOE, Leire Pajín, en la inauguración de la Casa del Pueblo de Elgoibar que fue destrozada el 20 de abril del pasado año por una bomba de ETA y cuya remodelación ha costado más de 300.000 euros.
"Los socialistas y nuestras casas del pueblo somos por desgracia objetivo frecuente de los violentos y de esa minoría de fanáticos que han hecho del dolor y de la destrucción su razón de ser y de existir", aseguró el dirigente del PSE, para añadir que la respuesta de su formación "una vez más ha sido volver a abrir las puertas de esta sede".
"Estamos hoy aquí para decirle a ETA que con sus bombas y sus amenazas no conseguirá nunca nada y que los socialistas, junto con la inmensa mayoría de la sociedad vasca, estamos decididos a dar una oportunidad a la paz y a que, más pronto que tarde, veamos el final del terrorismo".
En ese sentido, López insistió en que la banda terrorista "no podrá con las ansias de libertad de este país, que quiere vivir en paz y está harto de que una banda de matones pretenda tutelar nuestro destino como sociedad". Asimismo, se refirió a los que "buscan argumentos para amparar y justificar sus crímenes" a los que dijo que, al igual que ETA, "no tienen sitio en el futuro de este país".
Por ello, se comprometió en "trabajar para que ese final que todos anhelamos sea una realidad en los próximos cuatro años" porque "la paz será siempre una prioridad del Gobierno de cambio" que el dirigente socialista propone para Euskadi.
MEDIOS CONTRA ETA
Para llevarlo a cabo, aseguró que pondrán "todos los medios y todos los instrumentos del Gobierno vasco para acelerar el fin de ETA potenciando la eficacia de la Ertzaintza y su coordinación con los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, impulsando políticas de unidad democrática para combatir a ETA y a su ideología totalitaria, y colaborando al máximo con el Gobierno de España en el objetivo común de acabar con el terrorismo".
Asimismo, aseguró que defenderá "la legalidad democrática en lugar de dar argumentos que la cuestionan como en demasiadas ocasiones ha hecho la portavoz del Gobierno de Ibarretxe o el consejero de Justicia" y que "prestigiará a los poderes del Estado y también a la Justicia aunque sus decisiones en ocasiones nos gusten mas o menos".
Tras señalar que se empeñará en "deslegitimar ética, política y socialmente al terrorismo con pedagogía democrática y especialmente en dos campos fundamentales como la escuela y los medios de comunicación públicos", López remarcó que no dejará que "ningún objetivo partidista interfiera en el trabajo de todos los demócratas y del Estado de Derecho para acabar con el terrorismo".
"Porque el fin del terrorismo no es un objetivo de partido sino que es el objetivo de todos los partidos democráticos, como también debiera ser objetivo de todos reforzar la convivencia de una sociedad plural, diversa, como la vasca a la que se ha sometido durante los últimos años a demasiadas tensiones que provocaban la división, solo porque desde el propio Gobierno vasco y el tripartito se pretendían imponer una forma de entender Euskadi exclusiva y excluyente", aseguró.
El dirigente socialista abogó por "reforzar la convivencia" en Euskadi y por un modelo de "acuerdo entre diferentes" que es, según dijo, "el que ha permitido construir este país".
Por último, apostó por un pacto social entre sindicatos, empresarios e instituciones para buscar un "plan de choque" que logre dar una "respuesta urgente" a la crisis económica y acusó al Gobierno de Ibarretxe de "echar la culpa a los demás de todos los males" en vez de "proponer ideas, recursos y ejercer liderazgo", al tiempo que instó al lehendakari a que abandone sus "ensoñaciones identitarias".
