Vázquez destaca el papel del Rey el 23-F y asegura que el golpe fracasó por el compromiso del monarca con la democracia

Actualizado: viernes, 24 febrero 2006 22:50

A CORUÑA, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de A Coruña, Francisco Vázquez, y uno de los diputados que sufrió el asalto del teniente coronel Antonio Tejero al Congreso de los Diputados el 23 de febrero de 1981, aseguró hoy que el golpe de Estado del 23-F "fracasó gracias al compromiso inequívoco del Rey de España a favor del ordenamiento constitucional, la libertad y la democracia".

"Sin el Rey, el golpe hubiera triunfado", subrayó el regidor coruñés. Por ello, insistió en que el "prestigio de la Corona y la autoridad moral del Rey" condujeron a que una parte del ejército "antepusiera el valor de la disciplina y lealtad a cualquier otro y acatara las órdenes que aquella noche tan trascendental dio el monarca".

De este modo, el alcalde de A Coruña se desmarcó de la declaración aprobada ayer en el Congreso, coincidiendo con el 25 aniversario del golpe de estado, en la que se equiparó la actitud mantenida aquel día por el monarca con la de partidos políticos, prensa, sindicatos y la ciudadanía.

Asimismo, Vázquez recordó que hubo un gallego "trágicamente desaparecido en un atentado de ETA", que fue el teniente general Quintana Laccaci, quien tuvo un "papel determinante", al igual que el general Gabeiras, "que desde el Estado Mayor mantuvo en conexión con el Rey a toda la cadena de mando militar".

Así, según el alcalde de A Coruña, "todos los españoles de bien" se hicieron "juancarlistas incondicionales" a partir de esa noche, en lo que fue, añadió, "el colofón a una actitud de patriotismo y generosidad que no tiene parangón en la historia, dado que la Constitución se elaboró partiendo de la renuncia voluntaria por parte del Rey de muchas de las facultades y prerrogativas concedidas por la legislación anterior".

El alcalde apuntó, además, a la institución de la Corona pero, sobre todo, a la "fuerte personalidad" del Rey Juan Carlos I, como "la base y el sustento de gran parte del proceso de la transición", unido a toda una generación de políticos que, a su juicio, hicieron del consenso la regla de oro de su actividad política.