Actualizado: viernes, 10 noviembre 2006 16:18


MADRID, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, avisó hoy que el Gobierno no aceptará ni pulsos, ni chantajes en el proceso de paz y quiso dejar claro que este "no avanzará si no se acredita la voluntad de la banda de abandonar la violencia. Sin embargo, no especificó cómo debe acreditar ETA esta voluntad y también eludió responder si existen actas de conversaciones del Ejecutivo con la banda terrorista en Suiza.

De la Vega explicó, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, que el Gobierno "ni ha cambiado, ni va a cambiar el rumbo marcado desde el primer día". "Repetiré --añadió-- las tres condiciones inexcusables: ausencia total violencia, legalidad y respeto a las víctimas".

Insistió en las palabras de Zapatero y de Rubalcaba de que el Gobierno "no acepta, ni aceptará jamas ni pulsos, ni presiones, ni chantajes de ningún tipo, vengan de donde vengan".

No quiso responder a las declaraciones realizadas ayer por el portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, quien afirmó que la condena a De Juana Chaos hace imposible el proceso de paz, alegando que no es su costumbre valorar declaraciones y, añadió, "menos si provienen de formación ilegalizada". "El Gobierno no ha entrado, ni entrara en ese juego", apostilló.

Pero si dejó claro que "mientras ETA no asuma que la violencia no conduce a ninguna parte y que en un Estado de Derecho sólo se puede actuar dentro de la ley, habrá dificultades". "Pero no sólo dificultades --prosiguió--, el proceso no puede avanzar si no se acredita la voluntad de abandonar la violencia de manera definitiva". "Este es el único escenario que contemplo, no hay otro escenario", apostilló.

En otro momento de la rueda de prensa volvió a repetir que "sin ausencia de violencia no hay nada que hacer" y que el Ejecutivo desearía que "eso se produjera, de la misma manera que desearíamos que se aceptaran las reglas del juego democrático y la legalidad". "Eso es lo que hay", exclamó.

TODO EL TIEMPO QUE SEA NECESARIO PARA LA VERIFICACIÓN

La vicepresidenta fue preguntada en numerosas ocasiones por la forma en la que se debe realizar esa verificación, si se hace mediante un comunicado de ETA o por otras vías, pero no despejó la duda. Se limitó a señalar que el Gobierno trabaja con todos los instrumentos que le ofrece el Estado de Derecho como los servicios de información, la cooperación internacional y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

"Son los instrumentos para tener certidumbre y seguridad", recalcó, al tiempo que insistía en que el Ejecutivo "está firme en sus decisiones y principios, trabajando sin descanso" y añadió que los ciudadanos pueden tener la seguridad que "no se va a dar ni un sólo paso que no esté dentro de ese camino que hemos marcado".

Recordó de nuevo que tras 40 años de terror, el Gobierno lleva "4 meses escasos trabajando". Apuntó que ahora hay elementos positivos, aunque considera que "tiene que haber más" y quiso "poner en valor" esas cuestiones positivas recordando que llevamos "3 años sin víctimas mortales, más de 7 meses de alto el fuego y un rechazo absoluto a la violencia".

"EL PROCESO ESTÁ AHÍ, PUEDE AVANZAR O RETROCEDER"

"Nos vamos a tomar todo el tiempo que sea necesario para realmente tener una verificación clara, que quede acreditado de forma inequívoca esa voluntad que ETA ha expresado en el alto el fuego permanente", repitió.

En este punto, De la Vega insistió en que "el proceso es un proceso, está ahí, puede avanzar, pararse o retroceder". Apuntó que se ha iniciado con un alto el fuego permanente de ETA y que el Gobierno está trabajando para confirmar unas condiciones que ha establecido el presidente y se preguntó si es que "¿alguien quiere que se rompa el proceso y dejemos de trabajar?".

ROBO DE ARMAS

Sobre si el Ejecutivo tiene nuevos datos sobre el robo de armas que se produjo en Francia, se limitó a citar las declaraciones de Joan Mesquida, director de las FCSE, quien ha apuntado que el 30 de octubre mantuvo una reunión en París y los responsables franceses le habían solicitado 15 días mínimos para efectuar determinadas pruebas sobre la autoría del robo.

"Estamos a la espera de tener todavía más datos para poder confirmar lo que en estos momentos se sabe", apuntó, recordando que las investigaciones apuntan a ETA. "Pero falta completar esa información", insistió.

De la Vega no quiso hacer comentarios sobre la decisión del etarra Iñaki de Juana Chaos de reiniciar la huelga de hambre, tras conocer que ha sido condenado a 12 años de prisión por amenazas, y tampoco respondió a la pregunta de si existen actas en Suiza de las conversaciones del Gobierno con la banda terrorista.