De la Vega dice que el Gobierno siempre va a tender la mano al PP pero le recrimina que use a ETA para desgastarle

Actualizado: martes, 21 noviembre 2006 1:01


MADRID, 21 Nov. (EUROPA PRESS) -

La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, recalcó ayer que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero "ha estado y va a estar siempre" con la mano tendida al PP pero recriminó al principal partido de la oposición que, "en vez de trabajar por la paz", utilice la política antiterrorista para "desgastar" el Gobierno.

En declaraciones a La Sexta recogidas por Europa Press, la ministra de Presidencia aseguró que le gustaría que el partido de Mariano Rajoy "al menos" adoptase la misma posición "de apoyo" que el PSOE ante las treguas que se produjeron en la etapa de Gobierno de José María Aznar, igual que han hecho el resto de fuerzas políticas.

En este sentido, la número dos del Ejecutivo recordó que el PP apoyó en el Parlamento Europeo el inicio de conversaciones sobre el proceso de paz en Irlanda del Norte y, en cambio, criticó que ahora sea "incapaz" de hacer lo propio cuando se debate el caso español en el País Vasco.

Este hecho sobre el que incidió la vicepresidenta ilustra claramente, según enfatizó, que el PP, "en vez de trabajar por la paz lo que está es trabajando por desgastar al Gobierno". No obstante, reiteró que desde el PSOE "siempre vamos a tenderle la mano" al PP a pesar de su actitud "irresponsable" y "desleal".

"Esperemos --argumentó--, como espera la mayoría de los ciudadanos españoles, que rectifique, porque mientras haya posibilidades tenemos, no sólo el derecho, sino la obligación de intentarlo".

En cuanto al momento actual que atraviesa el proceso abierto en Euskadi desde la declaración de alto el fuego de ETA, De la Vega reconoció que, tal y como ha señalado en varias ocasiones el propio Zapatero, está siendo "largo, duro y difícil" pero subrayó que por parte del Gobierno se trabaja "por avanzar", un avance que está condicionado a la "ausencia total de violencia".

En esta línea, la ministra volvió a insistir en que las reglas del juego ya están marcadas y se tienen que respetar: "tiene que haber ausencia de violencia, va a hacerse con la memoria permanente de las víctimas y en el marco de la ley". "En ése ámbito es en el que estamos trabajando", dijo.

"Está siendo un proceso, como no podía ser de otra manera, largo. Es verdad que después de 40 años de terror, no se puede decir que haya pasado tampoco demasiado tiempo. Llevamos 4 meses, 7 meses de alto el fuego permanente, pero llevamos ya 3 años sin víctimas mortales", alegó.

Pese a estas dificultades, De la Vega defendió el derecho del Gobierno, "e incluso la obligación", de aprovechar esta "oportunidad" e "intentar" acabar con la violencia terrorista en el País Vasco, del mismo modo que hicieron en su momento "todos los presidentes de la democracia" aunque no lo consiguieran.

Además, incidió en que Zapatero cuenta con el apoyo de "la mayoría de los ciudadanos españoles" y de "todas las fuerzas políticas excepto el PP" y todos los líderes europeos". "Es el proceso en el que estamos y hay mucho en lo que seguir trabajando", añadió.

LA SITUACIÓN POLÍTICA ACTUAL: UN APROBADO

Sobre la situación política actual en España en términos generales, la vicepresidenta dijo que su valoración personal es de un "aprobado" y admitió que el país "marcha razonablemente bien". En su lectura de la situación, recalcó que España está creciendo desde el punto de vista económico por encima de la media europea y ya es la octava potencia mundial, además de que dos de cada tres empleos que se crean en Europa corresponden a nuestro país, y que se están impulsando políticas sociales "que van a permitir a los ciudadanos avanzar en el reconocimiento de derechos".

Y ello a pesar, dijo, de que el PP "introduce unos decibelios muy altos" y "mucho ruido" para crear "distorsión e incertidumbre" con el objetivo de que parezca que España "tiene muchos problemas". "Si alguien viniese de otro planeta y oyese a Rajoy, Acebes o Zaplana, probablemente diría: 'este país está a punto de romperse', como ellos dicen, 'esto es una catástrofe'. Pero realmente si esas mismas personas que vienen de fuera, analizaran la situación de la gente y vieran en su conjunto como está este país bueno, pues yo creo que este país marcha razonablemente bien", ejemplificó.