MADRID 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, evitó hoy valorar la posibilidad de que el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón pueda ser juzgado por prevaricación y apartado de la carrera judicial por abrir una investigación contra el franquismo.
"Dejemos a los tribunales de Justicia hacer su trabajo con respeto a su independencia, a su procedimiento y a sus tiempos", dijo en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Ayer, el magistrado del Tribunal Supremo Luciano Varela, que instruye la causa, dictó un auto en el que se ven motivos para sentarle en el banquillo, si bien pidió que la Sala, compuesta por cinco magistrados, la que decida si finalmente archiva el caso o bien le
De la Vega tampoco valoró la decisión del Tribunal de Cuentas de abrir diligencias de investigación sobre un gasto de 2,3 millones de euros aprobado por el Gobierno de José María Aznar destinado a la empresa norteamericana Piper Rudnick para, entre otras cosas, gestionar la frustrada concesión al ex presidente de la Medalla de Oro del Congreso de Estados Unidos. De la Vega sólo dijo tener "plena confianza" en la actuación de este órgano.