MADRID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
Verónica Portell, hija del primer periodista asesinado por ETA en 1978, José María Portell, presentó hoy en Madrid su primer libro, 'Y sin embargo, te entiendo', compuesto por veintisiete narraciones cuyo argumento gira en torno al problema vasco, aunque "sin intención política". Portell explicó que en estos relatos no ha ido en busca "de razones, sino de sentimientos" y que su objetivo no es "arrojar luz sobre el problema" ni ser "un símbolo de nada".
La autora se definió a sí misma como una "observadora de su entorno" y destacó el "ejercicio de introspección" que realizó para escribir su libro, una narración coral de veintisiete relatos que describen la historia de varios personajes que rodean el secuestro de un concejal en Euskadi por ETA; la esposa del secuestrado, el ertzaina, la madre que perdió a su hija en un atentado, el escolta, los padres del etarra, el secuestrador, el cura vasco, el lehendakari, el intermediador, etc.
La autora aclaró que su intención no es "juzgar, justificar ni siquiera reivindicar", sino dar a conocer "el impacto en los sentimientos de los verdugos, de las victimas, de quienes quedaron rotos por la muerte, de los recordados, de los muchas veces olvidados".
Portell explicó que se trata de un libro "de ficción" en el que la mayoría de los personajes son imaginarios, aunque para ello haya tomado "parte de la realidad" de los relatos de varias personas. "He tenido que meterme en la piel de las personas que han ejercido o sufrido de manera directa o indirecta la violencia", dijo.
NO VA A DEJARSE "MANIPULAR"
En la presentación del libro, a la que acudió acompañada por el periodista Iñaki Gabilondo, Portell señaló que el tiempo transcurrido desde la muerte de su padre, cuando ella tenía ocho años, "le permite mirar desde otra perspectiva", y que no va "a dejarse manipular". La autora contó que escribía poesía de niña, pero que dejó de hacerlo en su adolescencia cuando ganó un premio por el que se sintió "en el punto de mira por ser la hija de, y, en cierto modo, manipulada y asfixiada", añadió.
Por otra parte, aunque consideró este libro como un "ejercicio catártico" por que ha contado cosas que había "acumulado durante muchos años", no descartó publicar de nuevo sobre su entorno, puesto que está escribiendo, esta vez, acerca de personajes "en un período de tregua".
Gabilondo calificó la obra como "un libro de amor a la vida y un monumental ejercicio de generosidad" y destacó su carácter literario y "lleno de poesía". Asimismo, definió el texto como una "pequeña pieza portadora" al futuro de España y del País Vasco.