Víctimas-. La presidenta de la Fundación atribuye la falta de complicidad entre PP y PSOE al 11-M

Advierte en el Partido Socialista un "enorme voluntarismo" de lograr el fin del terrorismo y duda de que ETA renuncie a un precio político MADRID 1 Mar. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Mayte Pagazaurtundua, consideró hoy que la falta de complicidad entre PP y PSOE en materia antiterrorista parte del "desgarro" que supuso el 11-M.

En declaraciones a la cadena Cope recogidas por Europa Press, dijo que desde esos atentados en marzo de 2004 en Madrid se rompieron "complicidades muy profundas" y "necesarias para los consensos políticos" que aún "no se han recuperado". "Todos hemos sacado lo peor de nosotros desde ese atentado", valoró.

La presidenta de la Fundación manifestó que los que siempre han "creído en el frente democrático de los partidos constitucionalistas", se encuentran ahora "muy descorazonados" al "ver el desgarro" en las relaciones "entre los grandes partidos".

Pagazaurtundua, quien ayer se reunió con destacados dirigentes del PP a quienes pidió que tendieran puentes al PSOE para volver al Pacto contra las Libertades y el Terrorismo, advirtió de que en la actualidad se ha "mezclado" una "parte importante del juego por el poder" con algo "tan relevante para toda la sociedad (...) como la lucha antiterrorista".

En cuanto al papel de las víctimas, señaló que, bajo su punto de vista, "los colectivos mayoritarios de víctimas hablan muy claramente de la necesidad de derrotar al terrorismo y que haya vencedores y vencidos, que es lo contrario de lo que dicen los nacionalistas", porque estos últimos tienen "mucho de lo que avergonzarse" y necesitan "trastocar toda la memoria del pasado".

RIESGOS DEL VOLUNTARISMO Reconoció, no obstante, que en el colectivo de víctimas hay también "otras voces que tienen una enorme confianza en la política del presidente del Gobierno". Para Pagazaurtundua, "ésta es una realidad, pero no la más interesente para ser eficaces". Según ella, en el Partido Socialista "hay un enorme voluntarismo" para lograr el fin del terrorismo, pero alertó de desconocer cuáles son los "riesgos" de "los diferentes pasos tácticos que están dando".

A pesar de pedir la vuelta del Pacto Antiterrorista, señaló que "la clave" de la situación actual que vive el País Vasco se encuentra en el "comportamiento del nacionalismo que gobierna en Euskadi" que "desea que no haya vencedores y vencidos".

Como apreciación personal, Pagazaurtundua manifestó pensar "cada vez más firme" que "no da la impresión de que ETA tenga ningún deseo de abandonar definitivamente el terrorismo sin obtener precio político". "Como tiene oxígeno de todo el mundo nacionalista", explicó, mientras no se les corte ese oxígeno "que le está dando PNV y EA en sus pretensiones de obtener algún tipo o muchos precios políticos por abandonar el asesinato o la amenaza de asesinar, no puede funcionar ese esquema por muy voluntarista que se pretenda ser (...) y por mucho anhelo de fin de terrorismo que se tenga", como tiene toda la sociedad.

En el caso de que se acepte una paz sin vencedores ni vencidos, Pagazaurtundua avisó de que las víctimas "podrían llegar a ser doblemente victimizadas" porque sería "lo mismo que decir que los vencidos sean todos aquellos que han peleado y pelean por la libertad ideológica en el País Vasco y las propias víctimas del terrorismo".

Al ser preguntada por qué no acudió a la manifestación organizada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo el pasado 25 de febrero en Madrid para protestar contra la política antiterrorista del Gobierno explicó que acudió la vicepresidenta de la Fundación porque ésta, debido a su carácter público, "procura tener un perfil muy discreto en lo que se refiere a manifestaciones" y otro tipo de actividades cívicas.

Cuestionada por la estrategia adoptada por el PSE, confesó mantenerse "bastante al margen" de las actividades de este partido "desde hace bastante tiempo por decisión personal". En este sentido, explicó que "los partidos someten a una disciplina férrea a sus afiliados" y ella hace bastantes años que cree que esto "es una cuestión secundaria" mientras persista el "problema de falta de libertad y de necesidad de luchar por las libertades políticas e ideológicas en el País Vasco".