Cree que si ETA abandona las armas, reconoce su equivocación y se consolida la paz durante unos años, las víctimas serán generosas
BILBAO, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Fundación Fernando Buesa y viuda del dirigente socialista asesinado por ETA, Natividad Rodríguez, consideró hoy que sería "demoledor" para la sociedad vasca que se lograra "una paz rápida" a cambio de la concesión de privilegios a los presos de ETA. Además, afirmó que, si la banda armada abandonara las armas, reconociera su equivocación y se consolidara la paz con el paso de los años, las víctimas "podrían ser generosas".
En declaraciones a Europa Press, Rodríguez señaló que, para avanzar en la reconcilización, la organización terrorista tiene que "recorrer el camino" del arrepentimiento y de asumir las consecuencias de sus actos.
A su juicio, en este proceso "deben respetarse el Estado de Derecho y las Leyes, que tienen que ser iguales para todos". "No puede haber exenciones ni privilegios porque, si no hay la misma tabla de medir para todos los ciudadanos, no podremos organizar nuestra convivencia", aseguró.
Además, emplazó a no olvidar el pasado porque "se ha hecho de todo, ha habido amnistía, ha habido negociaciones, han salido todos los presos a la calle, han pasado muchos trenes y los han dejado pasar". "Han seguido causando sufrimiento y haciendo daño. Y ahora no se pueden irse de rositas. Eso no puede quedar impune porque sería terrible para los ciudadanos que se comportan con normalidad y que son buenos ciudadanos y, por supuestísimo, para las víctimas", destacó.
A su juicio, de esa forma, "no se consigue la reconciliación" y recordó que, para conseguirla, se debe pasar por "un proceso largo". En este sentido, recordó las declaraciones que han realizado los asesinos de Ramón Baglietto, concejal de UCD. "¿Qué reinserción ha hecho esa gente? No se han arrepentido, ni tienen conciencia de haber hecho un daño moral", añadió.
Para la viuda de Buesa, "eso es lo que se vive en el País Vasco y subrayó que, para poder "reconciliar esas posiciones, esa gente tendrá que aprender que el comportamiento nocivo no se le puede permitir, que se tendrá que arrepentir, que tendrá que asumir sus consecuencias y sus responsabilidades". "Ese es el punto de partida del proceso", aseveró.
Tras destacar que "las víctimas tienen tanta o más humanidad que cualquiera", aseguró que "sabe lo hay en el corazón de una víctima, que no es venganza, pero sí Justicia", y apuntó que "podría haber la tentación de, para conseguir la paz, acceder a dar privilegios, hacer concesiones". "A mí me parece que sería demoledor para todos. Puede que ése sea un camino más corto, más rápido y que tenga una eficacia más a corto plazo, pero, a la larga, para la convivencia y, sobre todo, para el País Vasco sería demoledor", insistió.
LA PAZ
Sin embargo, se mostró convencida de que, "haciendo un ejercicio de imaginación y pensando de ya llevamos cinco años en los que ellos ya han abandonado las armas, deciden incorporarse a la vida política, reconocen que se han equivocado, las cosas se verían de otra manera". "Así la sociedad podría ser generosa, las víctimas podrían ser generosas", agregó.
En su opinión, ETA "tiene que salir derrotada", en el sentido de que tendría que asumir "que ha elegido el camino inadecuado, equivocado, que va a integrarse en la sociedad y a hacer país constructivamente". "No existe otra posibilidad de comienzo", aseguró.
Natividad Rodríguez dijo que situaciones como la de Azkoitia sólo sirven para "enfrentarnos unos a otros". Además, consideró que "los poderes públicos de Euskadi, llámase Gobierno vasco, Iglesia, juegan a la ambigüedad y desean que a ETA no salga derrotada porque comparten muchas cosas y muchos objetivos con ellos".
"Tienen una responsabilidad en cómo esta gente ha llegado ahí porque esto no ha surgido como una generación espontánea. Están adoctrinados desde bien jovencitos y eso no se borra así por así", dijo, para mostrar su convencimiento de que "hay una parte de la juventud vasca que está perdida y es irrecuperable".
