Zapatero se declara "hombre de Montilla" y dice que lo "lógico" en Cataluña es un gobierno del PSC

SABADELL (BARCELONA), 10 (EUROPA PRESS)

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se declaró hoy "un hombre de Montilla" atajando así especulaciones sobre los intereses socialistas en las elecciones catalanas del 1 de noviembre y auguró una victoria "cara y rotunda" del PSC, pese a que las encuestas insistan en lo contrario, convencido de que "quien gana no es quien más quiere sentarse en un sillón, sino quien más principios y valores tiene". Zapatero pidió que los catalanes acudan masivamente a las urnas para demostrar que son un pueblo "plenamente integrado en la convivencia de España".

Zapatero trasladó su apoyo a la candidatura de Montilla en un multitudinario mitin en el Pabellón Municipal de Deportes de Sabadell (Barcelona) donde no obvió los ataques al PP y a CiU y donde auguró una victoria socialista no sólo en las elecciones catalanas, sino en las municipales, autonómicas y en las próximas generales, para que "la derecha cambie y se renueve".

En su intervención, Zapatero dio por buenos los ataques recibidos en los últimos años procedentes del PP por "defender, intentar comprender, apoyar y respetar Cataluña" y porque "Montilla, Maragall y yo podemos decir aquí y en Madrid lo mismo cada día". Zapatero se confesó "un hombre de Montilla" y se deshizo en elogios al candidato socialista por su "trabajo, corazón y cabeza". También hubo reconocimiento público para Maragall por su "compañerismo y dignidad".

LA CATALUÑA MADURA VOTA MONTILLA

El presidente del Gobierno dio por hecho que la Cataluña "madura y solidaria" sabe que "votar a Montilla representa, sobre todo, votar principios, valores y autenticidad" y garantizó que "con Montilla no habrá cambio de chaqueta" porque "siempre ha tenido las mismas ideas" y ha trabajado "pensando más en el conjunto que en él".

Además, dijo, "ha demostrado que sabe gobernar" y "comparece ligero de equipaje, sin ataduras, y sin tener que arrepentirse de nada del pasado", en una velada referencia a los pactos de CiU con el PP y la candidatura de Artur Mas, y "pudiendo decir a los ciudadanos que tiene relación con el Gobierno del PSOE en España".

Para Zapatero, Cataluña "piensa progresista, mira a la izquierda y es solidaria", por lo que "lo lógico es un gobierno progresista, que mira a la izquierda y que es solidaria y eso es lo que representa Montilla", llegando a atribuir al al candidato logros como la aprobación del Estatut en dos años. "Cataluña merece un gobierno de seriedad, eficacia" y que "esté cerca del Gobierno de España", apostilló.

También hubo ataques para CiU y lamentó que se plantee las elecciones catalanas como una "segunda vuelta de la que perdieron hace cuatro años y auguró que "segundas partes nunca fueron buenas". Asimismo, reprochó a la federación nacionalista que "enarbole la bandera" del catalán después de "tantos años apoyando a los gobiernos del PP".

RESPETO AL CASTELLANO Y EL CATALÁN

En este sentido, resaltó que la convivencia pasa por "respetar a quien hable catalán y castellano, a quien haya nacido aquí o allí, sin enarbolar ninguna bandera, sino con hechos". Así, recordó que su Gobierno, que "respeta a todos y defiende la identidad de cada pueblo y sus lenguas", ha conseguido el reconocimiento del catalán en Europa y "ha cambiado el rumbo de proyectos" como el Plan Hidrológico Nacional "gracias al voto mayoritario de Cataluña" en las últimas elecciones generales".

Añadió el retorno de los 'papeles' de Salamanca y apostilló que "no presumimos ni decimos que es nuestra bandera". "Todas las banderas son de todos, igual que las lenguas, que están para que todos convivamos con ellas". Zapatero también terció en la polémica por la propuesta de celebrar un cara a cara entre Montilla y Mas en castellano y manifestó su "sorpresa" porque las "excusas" de Mas, llegando a preguntar "por qué tendrán temor al debate". "No sé si se atreverá, pero si se atreve lo va a ganar Montilla, en catalán y en castellano", sentenció.

Zapatero dedicó poco tiempo a hablar del PP y se limitó a acusarles de haber intentado sembrar la "confrontación y la discordia" hacia Cataluña. Por contra, recordó que el Gobierno del PSOE "aguantó" y demostró su "confianza en Cataluña" y por ello aseguró que los catalanes "saben que tienen que ir masivamente a votar para seguir demostrando que es un pueblo culto, avanzado y plenamente integrado en la convivencia de España".

El presidente del Gobierno presentó al PSC y al PSOE como los partidos de la "cohesión y la integración" frente a los que "siembran la discordia y que no tienen un proyecto para este país". Además, cerró su intervención con un "agradecimiento colectivo" a "la inmensa mayoría de catalanes y sus fuerzas políticas" por el apoyo al Gobierno en el proceso de paz en Euskadi.