MADRID, 21 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó hoy que la Unión Europea "está afrontando sus responsabilidades" en lo relativo a la política de inmigración, y aseguró que "Europa estará cada vez más implicada en la gestión de las crisis migratorias".
En su comparecencia ante el Pleno del Congreso de los Diputados para informar sobre la Cumbre, resumió los resultados del Consejo Europeo de la semana pasada subrayando que la UE tiene "una agenda de futuro", y "está en marcha y a buen ritmo a pesar de los problemas" con la ratificación de la Constitución europea, que sigue sometida a un 'periodo de reflexión'.
Según dijo, Europa es consciente de que su "credibilidad ante los ciudadanos" depende del éxito de los proyectos concretos, y uno de ellos, el que más afecta a España, es la gestión de la inmigración.
Zapatero destacó que el Consejo Europeo recogió las peticiones españolas y "en sólo ocho meses, desde las primeras crisis en Ceuta y Melilla, España ha colocado los temas de la inmigración en el centro de la agenda europea". A su juicio, desde el pasado otoño, el gobierno ha generado "especial sensibilidad" en las instituciones europeas y ha convertido el tema en "recurrente" en las Cumbres. Además, Finlandia, próxima presidencia de la UE, hará de la UE tema prioritario.
El jefe del ejecutivo destacó que aunque la UE "no cuenta aún con todos los instrumentos necesarios" en política migratoria y "los que hay son muy experimentales", sí "existe una clara voluntad política" de hacer una "auténtica política europea de la inmigración". Así, dio apoyo a la conferencia ministerial sobre migración y desarrollo del próximo julio en Rabat y propuso relanzar el diálogo migratorio con los países africanos.
España, por su parte agradeció la cooperación europea en las costas canarias y "pidió reforzar cuanto antes la capacidad de acción de Frontex", la agencia europea de control de fronteras. "España no se siente sola en los problemas de inmigración , porque no lo está, Europa está afrontando sus responsabilidades", remachó.
Zapatero hizo hincapié en que la UE está comprometida con los problemas que interesan a los ciudadanos, y eso "resulta fundamental para renovar la confianza" de los ciudadanos en la UE. "Estoy convencido de que Europa está avanzando y que el éxito del proyecto europeo exige un salto adelante hacia una mayor integración política".
Los proyectos concretos, prosiguió, son uno de los dos factores que, según sus argumentos, demuestran que la UE no está parada por la crisis del Tratado constitucional. El segundo factor es que la UE se ha propuesto plazos para resolver este problema. Según se acordó en la Cumbre, la presidencia alemana de la UE presentará un informe en el primer semestre de 2007 y los Veinticinco tendrán que adoptar una "solución definitiva" como muy tarde en el segundo semestre de 2008.
"Por primera vez desde la crisis del proceso de ratificación del Tratado el Consejo ha establecido unas fechas para evaluar y encontrar una solución adecuada", agregó. A estos plazos se suma el que además, el 25 de marzo de 2007 los Veinticinco aprobarán una declaración política "confirmando los valores y ambiciones del proyecto europeo", coincidiendo con el 50 aniversario de la aprobación del Tratado de Roma.
LA AMPLIACION NECESITA PROFUNDIZACION
Zapatero relató, por otro lado, que los Veinticinco no harán de la llamada "capacidad de absorción" de la UE un nuevo criterio a la hora de admitir nuevos socios, pero sí ha encargado un informe a la Comisión Europea sobre esta "capacidad" para mantener un debate en diciembre.
El jefe del Gobierno consideró que las ampliaciones son un proyecto de "gran relevancia política, económica y estratégica", pero añadió que para que tengan éxito es necesario que vaya acompañada por una "profundización de la integración política", porque "más Estados necesitan más Europa". En su opinión, es necesaria una "ampliación razonable" que permita el funcionamiento de las instituciones.
ENERGIA
Zapatero relató además a los diputados que el Consejo Europeo prosiguió los trabajos para sentar las base de una política europea de energía, confirmando que se presentará un plan de acción para el Consejo de Primavera de 2007, además de tomar nota del informe del alto representante para la política exterior, Javier Solana, sobre la vertiente exterior de la política energética.
Asimismo, describió que el Consejo apoyó líneas de acción para que la UE refuerce sus capacidades ante situaciones de emergencia y crisis, desde atentados terroristas a catástrofes naturales o epidemias, e hizo un seguimiento del relanzamiento del llamado programa de La Haya de Libertad Seguridad y Justicia, con "especial referencia a la lucha antiterrorista, la cooperación policial y judicial".
Por último, recordó que los Veinticinco aprobaron declaraciones de política exterior sobre Irán, Oriente Próximo, Líbano, Serbia y Africa, aceptando la petición de España, Francia y Portugal de que se celebre una segunda cumbre UE-Africa "lo antes posible".