Zapatero dice que los vascos decidirán su futuro "dentro de la legalidad", camino por el que "se puede ensanchar todo"

Actualizado: miércoles, 5 abril 2006 19:04

Lasagabaster reclamó que los vascos determinen su futuro y pidió que su voluntad no se anule por "voluntades mayoritarias ajenas"

MADRID, 5 Abr. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, precisó hoy a la diputada de EA, Begoña Lasagabaster, en el pleno de control al Gobierno del Congreso de los Diputados, que los ciudadanos vascos "han decidido y decidirán su futuro dentro de la legalidad", al tiempo que dejaba claro que "por ese camino se puede ensanchar todo". La diputada de EA había defendido ante el presidente la participación de "todos" los representantes democráticos de los vascos en el proceso político que se abra tras verificar el "alto el fuego permanente" de ETA, dijo que son estos los que deben determinar el futuro y advirtió que la voluntad de los vascos "no se puede anular por voluntades mayoritarias ajenas a la sociedad vasca" o por "instrumentos legales externos a la misma".

Lasagabaster comenzó su intervención asegurando ser consciente de que se está ante un "reto de altura" con el alto el fuego permanente de ETA y aunque consideró que no se trata de una "carrera de velocidad", dijo que tampoco es una "marcha sin rumbo, ni ritmo". "Vamos a tener que ir por etapas, sin prisas pero sin pausas", exclamó.

Dijo confiar que "en breve" pueda quedar resuelta la "verificación" y se pueda pasar "inmediatamente" a las cuestiones "políticos", de las que dijo que probablemente serán "muy diferentes, pero legítimas todas ellas", pero sobre las que los políticos tendrán que llegar a acuerdos sobre sus procesos y consensos en un contexto de "reflexión serena".

Tras realizar esta argumentación, la diputada de EA preguntó a Zapatero si entiende que el principio "irrenunciable" aprobado en el Parlamento hace un año "sobre el respeto a la voluntad popular lleva implícito" el respeto a "lo que decidan también los representantes de la ciudadanía vasca".

Zapatero explicó que esa actitud será el "comportamiento general de todas las fuerzas políticas" ante la situación que hay en este momento "singular" en el País Vasco "después del alto el fuego permanente de ETA".

"Creo que la resolución que aprobó el Parlamento en el anterior Debate del Estado de la Nación es clara y responde a los términos y principios y fundamentos de la democracia, las cuestiones que afecten al futuro político y las instituciones han de decidirse únicamente por los representantes legítimos de los ciudadanos y no comporta, no lleva nada implícito", aclaró el presidente.

CAPACIDAD DE DECIDIR DE LOS CIUDADANOS

Recordó a Lasagabaster que tanto ella como él son "consecuencia del fruto de la capacidad de decidir de los ciudadanos" y explicó que el "principio democrático" se sustenta en "dos pilares básicos". Por un lado, la voluntad del pueblo, y por otro, en el "respeto a las reglas y a los procedimientos legales".

Lasagabaster agradeció la respuesta, reiteró que es un principio democrático que todos compartimos, dijo estar convencida de que de este asunto se va a hablar "largo y tendido", pero advirtió que "nadie puede predeterminar el resultado de lo que surja de un debate y una negociación".

La diputada de EA defendió la participación de "todos" los representantes democráticos de los vascos y apuntó que son estos --en una "mesa, foro, encuentro o conferencia"-- los que deben determinar en el futuro "lo que nosotros ahora no sabemos" y, una vez determinado eso, advirtió que la "voluntad de los ciudadanos vascos ratificada no se puede anular por voluntades mayoritarias ajenas a la sociedad vasca" o por "instrumentos legales externos a la misma".

Zapatero precisó a Lasagabaster que "los ciudadanos vascos han decidido y decidirán su futuro dentro de la legalidad" y mostró su deseo de que esa decisión sea fruto del "mayor acuerdo posible en términos políticos".

Insistió en que la decisión y la voluntad del pueblo "tiene que producirse siempre conforme a la legalidad y al Estado de derecho" por entender que esa es la "garantía de su libertad, de los que estamos aquí y la libertad de todos los ciudadanos".

Zapatero apostilló que esa es la "esencia de la democracia, las reglas y el respeto a las reglas y, por supuesto, dentro de esas reglas, la voluntad popular". En este sentido, explicó que "por ese camino se puede ensanchar todo", mientras que, advirtió que lo que no se puede hacer es "orillar, aislar el camino de las reglas y los procedimientos de la legalidad".