Zapatero recibe aplausos de los inmigrantes en su visita al CETI, donde de nuevo le volvieron a pedir 'papeles'

Actualizado: miércoles, 1 febrero 2006 16:33

CEUTA, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, visitó hoy el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Ceuta. Muchos inmigrantes, en tono festivo, le dedicaron muchos aplausos al jefe del Ejecutivo y esgrimieron pancartas de bienvenida, al tiempo que, como ayer martes en el de Melilla, proclamaron el lema 'papeles'.

Zapatero, que viaja acompañado de los ministros de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla y de Sanidad, Elena Salgado, vio como la comunidad de inmigrantes de Bangladesh en el CETI le mostraba pancartas con los lemas 'Todos los Bangladesh le deseamos sea bienvenido a Ceuta señor presidente', o 'Señor presidente, le damos las gracias', al tiempo que en las mismas le señalaban que son 'muy pobres' y le pedían ayuda para "vivir".

Entre aplausos, gritos de presidente y muchos inmigrantes que intentaban darle la mano, Zapatero recorrió estas instalaciones. Justo a la salida del CETI, cuando ya Zapatero salía en su coche con la comitiva oficial, una cincuentena de jovenes que portaba una pancarta de Argelia coreó 'Viva Zapatero' junto a la carretera.

APLAUSOS Y FOTOS EN LA CALLE.

Antes de su visita al CETI, el presidente del Gobierno acudió al nuevo Hospital Civil, donde comprobó de primera mano la marcha de las obras y se dirigió después al Instituto de Enseñanza Secundaria Luis Camoens. En las puertas le esperaban más de un centenar de personas que le recibieron con aplausos y con gritos de 'Zapatero, Zapatero'.

En el interior, Zapatero se dirigió primero a la sala de profesores, donde se interesó por la marcha de este Instituto de 900 alumnos. Después estuvo en la biblioteca. Por último, entró en un aula en la que se impartía matemáticas y un alumno le preguntó sobre qué le parecía Ceuta. Zapatero respondió que la gente le había tratado "muy bien" y que eran muy cariñosos.

Posteriormente, abandonó el instituto y a pie y rodeado de personas recorrió la escasa distancia que le separaba de la Delegación de Gobierno, donde se reunió con representantes de las cuatro culturas de la ciudad.

En ese paseo, los vecinos y personas que se habían acercado, de forma mayoritaria, prodigaron aplausos y saludos a Zapatero, demandándole autógrafos y pidiéndole fotorgrafiarse con él, aunque alguna persona de forma más aislada le pedía que gritara 'viva España'.

Posteriormente, Zapatero asistió a un almuerzo ofrecido por el presidente de la Ciudad Autónoma, Juan Vivas, en el Parador.