Zapatero rinde tributo a Maragall, ausente en el Comité del PSOE, por su "valentía, fortaleza y estatura institucional"

MADRID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -

El jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, quiso hoy ante el Comité Federal del PSOE rendir "un tributo de reconocimiento" al presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, "por su valentía y su capacidad de iniciativa, por su fortaleza movilizadora y por su estatura institucional".

El líder socialista expresó estas palabras en ausencia del aludido, que no acudió al máximo órgano entre congresos --tampoco lo hizo el extremeño Juan Carlos Rodríguez Ibarra ni el castellano-manchego José María Barreda--. "Como presidente del Gobierno, como socialista y como amigo, te expreso todo mi agradecimiento", le dijo en cualquier caso a Maragall.

El secretario general de los socialistas comenzó su intervención de más de una hora refiriéndose al referéndum que el pasado domingo dio 'luz verde' al 'Estatut'.

Indicó que una "amplia mayoría" lo respaldó y que los ciudadanos "han decidido su futuro" y confirmado que es "posible" avanzar en las reformas territoriales "con normalidad hacia más autogobierno, más cooperación", adecuándose a la Constitución, preservando el interés general y asegurando la solidaridad.

Así, Zapatero dio por "cumplido" un objetivo "político de gran calado". "El estatuto favorecerá el progreso de Cataluña y una relación más positiva con el resto de España, sostuvo el presidente, que se mostró convencido de que se ha dado "un paso decisivo en la consolidación de la España plural, que es la mejor unida y mejor cohesionada".

PROCESO RUIDOSO Y SILENCIO ELOCUENTE.

Con esta misma tesis, el líder del PSOE enfatizó ante el Comité Federal que los socialistas habían logrado este objetivo en un proceso "complejo y en algunos momentos difícil, que algunos se han empeñado en que fuera además ruidoso y que hoy están en un silencio elocuente", afirmó en alusión al PP.

A renglón seguido, Zapatero hizo un 'guiño' a las fuerzas que pidieron el 'sí', pero también a ERC. En primer lugar se refirió a las fuerzas políticas "que trabajaron con voluntad de acuerdo, con espíritu constructivo" y luego, dio las gracias a "quienes han discutido lealmente y constructivamente el proyecto, a pesar de que no lo apoyaran". En cualquier caso, se mostró convencido de que quienes "no lo han votado", sabrán "respetar" el texto estatutario y "querrán desarrollarlo lealmente". "Y vamos a cooperar a ello --dijo--. Es el Estatuto de todos, para todos".

NI RIESGO NI CAPRICHO.

El secretario general de los socialistas aseguró que la España plural que avanza es la que "construye". y, en clara alusión al PP, remarcó que las reformas territoriales "no son ni un riesgo ni un capricho de nadie". "Lo arriesgado --advirtió-- sería quedarnos paralizados cuando tantas cosas cambian a nuestro alrededor".

Zapatero citó las reformas estatutarias completadas y las que están por venir e indicó que el contenido de las propuestas de las distintas comunidades "no es muy distinto entre sí". "Todos los proyectos, también el balear y el aragonés, introducen nuevos derechos; todos, también el valenciano, asumen una nueva estructura judicial; todos pretenden introducir principios y compromisos concretos en materia de financiación; todos introducen mayor precisión y garantía de las competencias autonómicas", expresó.

El presidente considera coherente que los socialistas, que creen en las reformas, las impulsen. "Pero no es coherente, ni tampoco leal, que otros que las impulsan allí donde gobiernan sigan combatiéndolas, afirmen que no son necesarias, conviertan irresponsablemente su oposición en un arma de desgaste electoral y, lo que es peor, en un instrumento de confrontación territorial", se quejó en referencia a los 'populares'.

"Los españoles pueden comprobar fácilmente que allí donde gobierna el PP, los socialistas somos capaces de prestar apoyo a lo que beneficia a la Comunidad, olvidándonos de los efectos políticos inmediatos", declaró Zapatero, que enfatizó que "no sólo hay dos formas de gobernar", sino también dos maneras "de ejercer la oposición".

Por último, se mostró convencido de la bondad del proceso de reformas y apostó por complementarlo con una mejora de los instrumentos de cooperación, citando las Conferencias Sectoriales, la Conferencia de Presidentes y la reforma del Senado, entre otros aspectos.