MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del PP en el Congreso, Eduardo Zaplana, afirmó hoy que "no ha criticado" ni lo "piensa hacer" la estrategia de sus compañeros Josep Piqué en Cataluña ni la de Javier Arenas con respecto a la reforma del Estatuto de Autonomía de Andalucía y apuntó la posibilidad de que "alguna persona" de su partido haya interpretado sus declaraciones de forma errónea.
En declaraciones a Onda Cero recogidas por Europa Press, afirmó que los resultados del PP en las elecciones autonómicas del pasado uno de noviembre son "tremendamente dignos", aunque matizó que supone una "obviedad" que su partido "tiene que aspirar a tener un resultado mucho más importante en Cataluña y defender esa Cataluña plural" por la que abogan los 'populares'.
Con respecto al Estatuto andaluz, insistió en que el término 'realidad nacional' no gusta a ningún dirigente del PP. "Otra cosa es que se haya hecho un esfuerzo por adaptar un texto que era clarísimamente contrario a la Constitución y dejar un texto mucho más digno", indicó y descartó que se pueda interpretar el apoyo de su partido al texto como un "golpe de timón" en materia de política territorial.
En el caso andaluz, consideró que el PP ha optado por "el mar menor, intentar reconducir el proceso en aquellos casos que se puede" y aseguró que en el caso del Estatuto catalán no se podía.
De esta forma, Zaplana reaccionaba a la interpretación que se ha hecho, a su juicio "exagerada", a un reciente artículo publicado por el dirigente 'popular' y en el que se preguntaba por qué el PP se había visto "arrastrado" a "la carrera frenética por dar carpetazo al éxito de la España autonómica" cuando los españoles "no reclamaban ansiosamente este proceso de reforma" de los estatutos de autonomía que ha impulsado el Gobierno del PSOE, así como las declaraciones efectuadas tras conocer los resultados de los comicios catalanes.
AL PP NO LE GUSTA LA 'REALIDAD NACIONAL'
"Yo he dicho siempre que España no es el resultado de sumar 19 partes, pero es que lo dice el Partido Popular, Mariano Rajoy, todo el mundo. Si preguntan si me gusta el término 'realidad nacional', le diré que no, pero es que Mariano Rajoy lo dijo expresamente unas horas antes de publicarse ese artículo en el Congreso", explicó y reiteró que tanto él como el resto de su partido está "en contra de todo este proceso de 19 partes, cada una defendiendo sus ríos, su derecho y negando el de los demás". "Así no se construye un país, sino que se desvertebra", remachó.
En este sentido, explicó que lo que él reclama es que los políticos se ocupen de "recuperar una agenda nacional" y abandonen los debates estatutarios "cuyo responsable (...) es Rodríguez Zapatero".
Para el portavoz de los 'populares', al interpretar su artículo o sus declaraciones sobre los resultados de las elecciones catalanas como una crítica interna "lo único que se quiere (...) es trasladar una imagen de división en el Partido Popular que no existe bajo ningún concepto". En este sentido, recordó que en su momento se decía de él que no era "aznarista".
Zaplana afirmó que no va a entrar a investigar de dónde parten esas interpretaciones, a su juicio erróneas, de sus declaraciones. "No quiero saber ni siquiera a quien" se deben, dijo. "Si son medios de comunicación, algunos interesados, si son, por qué no decirlo, alguna persona de mi partido, sobre todo, estoy seguro mucha gente de la oposición". "Pero yo no me dedico a indagar en esas cuestiones", zanjó.
Por otra parte, calificó de "ridículo" el rumor que corre por algún confidencial en Internet sobre que dejaría su cargo actual para pasar a la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES) que preside José María Aznar. Zaplana aseguró que seguirá ejerciendo de portavoz parlamentario de su partido "mientras Mariano Rajoy quiera".
EL PROCESO ESTÁ CONDENADO A SALIR MAL
Con respecto al proceso iniciado tras el alto el fuego permanente de ETA, señaló que la banda terrorista "está crecida" desde entonces y la democracia, "cada día más debilitada". Además, consideró una "barbaridad" que el presidente del Gobierno dijera que algunas decisiones judiciales obstaculizan el proceso.
Asimismo, denunció que desde el Gobierno se acuse al PP de entorpecer el proceso. "Nosotros no somos los que hemos robado 320 pistolas en Francia ni hemos intentado quemar a policías en Bilbao ni asaltamos sedes de partidos políticos, ni quemamos cajeros, ni nos dedicamos a hacer seguimiento a concejales del País Vasco".
Según Zaplana, el Gobierno está "muy metido en esa necesidad de que se pueda llegar a un acuerdo". Sin embargo, añadió, el PP cree que ese acuerdo no se podrá alcanzar, "desgraciadamente, hasta que se ceda". Por eso, auguró que este proceso "tendrá que salir mal, pero no por culpa de nadie, sino porque estaba condenado desde el primer momento y fue un absurdo que el Gobierno nos metiera en la forma que nos metió en el mismo".