PAMPLONA 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional y la Guardia Civil se han incautado recientemente en dos operaciones antidroga de casi 2,5 kilos de cocaína que iba a llegar a Navarra oculta en una bobina de funda de cable eléctrico y en láminas plastificadas.
Las operaciones, independientes la una de la otra, se desarrollaron a raíz de controles policías que tuvieron lugar en el aeropuerto de Francfort (Alemania) y en el aeropuerto de Barajas. Una vez localizada la droga, las Fuerzas de Seguridad esperaron a que sus destinatarios fueran a recogerla, momento en el que fueron detenidos.
Con estas dos operaciones, la Guardia Civil y la Policía Nacional se han incautado de 24.750 dosis de cocaína por un valor de unos 410.000 euros y ha detenido a dos personas, una mujer de nacionalidad colombiana y un hombre natural de Perú.
La principal operación tuvo lugar el 29 de marzo, cuando la oficina de análisis de riesgo de Barajas localizó un paquete sospechoso que llegaba desde Colombia. Así, la Guardia Civil activó un servicio para controlar el recorrido de este paquete, que llegó hasta Pamplona.
Una vez en la capital navarra, cuando la receptora fue a recogerlo, la Guardia civil procedió a su detención. Se trata de M.T.V.P., mujer de 29 años, natural de Colombia y vecina de Pamplona, a la que se acusa de un delito contra la salud pública.
La droga estaba oculta en el interior de los últimos metros de una bobina de funda plástica de unos 1.500 metros. En total, la Guardia Civil aprehendió 20.000 dosis de cocaína de alta pureza (algo más de 2 kilos), que alcanzarían en el mercado un valor de 350.000 euros. Tras la detención, se realizaron dos registros en Pamplona en los que fue incautada diferente documentación. El juez envió a prisión a la detenida.
En la otra operación antidroga, desarrollada con la coordinación de la Agencia Estatal de Administración Tributaria y la Policía Nacional, fue detenido un joven peruano de 22 años domiciliado en Pamplona, S.J.T.L., como presunto autor de un delito de tráfico de drogas y contrabando.
En el aeropuerto de Francfort fue detectado un paquete sospechoso, lo que fue comunicado a la Vigilancia Aduanera de Madrid. Al igual que se hizo en el caso anterior, la Policía vigiló el envío hasta que le llevó a su destinatario, en la oficina de Correos de la calle Juslarrocha, en Pamplona. En el paquete había 19 laminas plastificadas, dentro de las cuales había cocaína impregnada en papel. En total, se incautaron unos 475 gramos, con lo que podrían haberse elaborado 4.750 dosis por un valor de 60.000 euros.
El delegado del Gobierno en Navarra, Vicente Ripa, advirtió a los traficantes de que "se olviden de Navarra, porque aquí la lucha contra ellos es sin cuartel: transporte la droga, en funda de cable, en láminas de papel, en chupa-chups, en adornos navideños o en vehículos de gran cilindrada; la quieran introducir por tierra o por aire; la pretenda distribuir en la Zona Media o en la Ribera, en Pamplona y su Comarca o en el Norte de Navarra". "Que sepan los traficantes que, si ellos no descansa, nosotros tampoco", añadió.
Sobre las dos detenciones, Ripa explicó, "en atención a su procedencia, que la vinculación entre la cocaína y algunos países sudamericanos es evidente, pero lo es tanto como que no sólo los colombianos o los peruanos trafican con cocaína y que, por descontado, no todos lo hacen".