En la localidad se lanzaron cohetes y repicaron las campanas para celebrar el hallazgo
PAMPLONA, 4 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las Santas Reliquias de San Adrián, robadas el pasado 29 de agosto, fueron trasladadas hoy de nuevo a la iglesia de la localidad después de que esta mañana una mujer de nacionalidad rumana, G.S., de 27 años, acudiera a la parroquia, confesara que las había sustraído y guiara al párroco hasta el lugar donde las tenía escondidas. La mujer fue detenida por la Guardia Civil y se le imputa un delito de hurto en la Iglesia.
Según explicó hoy en rueda de prensa el párroco de la localidad, Luis Miranda, las reliquias, que datan del siglo XII y contienen restos de mártieres cristianos procedentes de Roma, no van a contar con ninguna protección adicional a partir de ahora, "para que la gente pueda venerarlas". El mismo párroco fue quien aportó datos sobre la mujer, ya que la vio salir "con un saco" el día del robo.
"Para San Adrián, estas reliquias son un gran tesoro espiritual y la gente las venera con gran devoción. Desde que las robaron, el pueblo ha vivido una semana trágica", señaló el sacerdote, quien explicó que el hurto se cometió tras haber dejado la verja que las protegía abierta después de un "funeral masivo".
Esta mañana, tras aparecer las reliquias, se lanzaron cohetes y repicaron las campanas en la localidad y "todos se han emocionado", apuntó, y añadió que el pueblo "está gozoso y dichoso".
Por su parte, el coronel-jefe en funciones de la IX Zona de la Guardia Civil, Benito Salcedo, señaló que en su recuperación han participado cerca de 30 agentes de la Guardia Civil. La Benemérita le dio prioridad a este tema porque se trataba de un asunto "de elevado valor sentimental". La mujer había sido "vigilada permanentemente" por agentes de la Guardia Civil tras los datos aportados por el párroco.
El delegado del Gobierno, Vicente Ripa, manifestó por su parte que la colaboración ciudadana ha sido "imprescindible y de enorme valor" para resolver este caso y destacó el "ápice de arrepentimiento" de la mujer que las sustrajo. "Que la persona imputada sea rumana no puede condicionar la opinión positiva del colectivo inmigrante", agregó Ripa.
Finalmente, mostró su alegría por el hallazgo porque "quitar a un pueblo lo que venera es quitarle el espíritu y el alma". Como se recordará, el robo causó un hondo impacto en la localidad. Más de 1.000 personas reclamaron en una concentración su devolución.
LOS HECHOS
Los hechos ocurrieron el pasado día 29 de agosto, cuando sobre las 11 horas el párroco de la iglesia, Luis Miranda, observó la ausencia de las reliquias y cómo una mujer salía de la iglesia con un saco.
Tras conocer la Guardia Civil estos hechos, se puso en marcha un operativo en la localidad para obtener huellas e indicios. El dispositivo continuó con agentes especialistas en Investigación de delitos contra el Patrimonio Histórico, que realizaron vigilancias permanentes de esta mujer y de su entorno para evitar el traslado de la reliquia de la localidad, al sospechar que pudiera estar en el pueblo.
Esta vigilancia y las conversaciones mantenidas por la Guardia Civil y las personas vinculadas con la presunta autora de los hechos, dieron como resultado que hoy, sobre las 9 horas, la acusada, junto con otras dos personas, entrara en la iglesia y comunicara al párroco el lugar donde tenía escondida la reliquia, adonde se trasladó el párroco para recuperarla.
Tras ello, los acompañantes de la detenida fueron trasladados al cuartel de la Guardia Civil de San Adrián para tomarles declaración por su presunta participación en los hechos.
DONACIÓN DE DOÑA URRACA
Las Santas Reliquias de San Adrián son los restos más venerados por sus vecinos y dan nombre a sus fiestas patronales. En el siglo XII, Doña Urraca, descendiente del Rey de Navarra, en agradecimiento por recobrar la vista a su paso por la ermita de la Virgen de Palma, situada entonces en el lugar denominado popularmente como el Rebote, regaló a la localidad unos huesos de santos mártires desconocidos, procedentes de las catacumbas romanas.
Desde 1991, la Virgen de Palma es bajada al municipio el día de la víspera para acompañar a San Adrián y la arqueta o cofre que contiene las Santas Reliquias en la procesión de las fiestas patronales.
