Detenido un vecino de Estella acusado de envenenar a los perros de sus vecinos
PAMPLONA, 15 May. (EUROPA PRESS) -
La Policía Foral ha imputado a dos vecinos de Tudela por maltrato animal, tras haber encontrado en su poder dos gallos malheridos, fruto presuntamente de su utilización en peleas ilegales.
Los hechos se remontan al pasado 22 de abril, cuando una patrulla del Grupo de Prevención y Atención Ciudadana de la Comisaría de Tudela de Policía Foral que realizaba un control de seguridad ciudadana, detuvo un vehículo en el que viajaban tres adultos y un menor.
En el interior del mismo encontró dos gallos, uno de los cuales se encontraba en el maletero del vehículo y el otro debajo del asiento del conductor. Ambos presentaban heridas y signos de haber sido utilizados o haber participado presuntamente en una pelea, según ha informado en una nota el Gobierno de Navarra, que ha señalado que se identificó a los usuarios y conductor del vehículo, y los gallos fueron enviados al Centro de Recuperación de la Fauna Silvestre del Ejecutivo foral.
Las investigaciones que posteriormente realizó la Brigada de Medio Ambiente de la Policía Foral determinaron que se imputara a C.H.H., vecino de Tudela de 33 años (con antecedentes por maltrato animal) y a T.D.T.C. de 42 años también vecino de Tudela, por una falta contra los intereses generales por maltrato animal. Los hechos fueron puestos en conocimiento del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Tudela y de la Fiscalía de Medio Ambiente.
ENVENENAMIENTO DE PERROS
Por otra parte, la Policía Foral detuvo el pasado 3 de mayo a J.U.A., de 59 años y vecino de una localidad de Tierra Estella, al que imputó un delito de daños por ser presuntamente el autor de un envenenamiento a varios perros propiedad de otro vecino de la localidad.
Las investigaciones se iniciaron tras recibirse en la comisaría de Estella una denuncia en la que una persona relataba que sus perros habían sido envenenados. Fallecieron dos de ellos. En la denuncia se detallaba que los perros vivían en la casa familiar que contaba con jardín y que se habían producido desavenencias con un vecino que se quejaba por los ladridos.
Se da la circunstancia de que durante los últimos meses, varios de los canes habían sufrido diversos problemas de salud (dos de ellos fallecieron), cuyo origen el veterinario no había podido determinar, según ha informado el Gobierno de Navarra.
El 12 de abril los denunciantes observaron cómo el vecino se acercaba hasta su jardín, donde hay un pequeño agujero en la verja, permanecía unos instantes y abandonaba el lugar. Al comprobar que uno de los perros de la familia acudía hasta ese punto, los denunciantes se acercaron y observaron que había varias porciones de carne con pequeños trozos blancos incrustados y que el animal había comenzado a comer algunas.
Ante las sospechas de que pudiera ser algún tipo de producto tóxico, los denunciantes recogieron la carne que quedaba en el lugar y se pusieron en contacto con el veterinario, que les dio pautas para provocar el vómito al perro.
Con posterioridad, acudieron al centro veterinario para mandar analizar la carne. El informe de laboratorio constató que había una importante presencia de varios medicamentos, cuyos efectos en perros coincidían con el cuadro clínico de envenenamiento que habían presentado los animales en los últimos meses.
Por todo ello, el pasado 3 de mayo se imputó por un delito de daños al presunto autor de los envenenamientos, que resultó ser J.U.A., de 59 años y vecino de una localidad de Tierra Estella. Se encarga de las diligencias el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Estella.
