PAMPLONA, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
La sociedad pública NILSA gastará 85,5 millones de euros entre 2006 y 2015 en la remodelación de 9 depuradoras, creación de 3 nuevos colectores, así como la construcción de varios tanques de tormentas y la adopción de sistemas de tratamientos biológicos y de tratamiento de agua residual. Además, Navarra será declarada "zona libre de fósforo".
El Gobierno de Navarra dio hoy luz verde a este proyecto, que cuenta con una financiación del 30% del ministerio de Medio Ambiente, dado que estas actuaciones se enmarcan en el II Plan Nacional de Calidad de las Aguas, Saneamiento y Depuración. El consejero de Administración Local y portavoz del Ejecutivo, Alberto Catalán, destacó el liderazgo de Navarra en materia de depuración de aguas residuales.
Concretamente, se remodelarán y ampliarán 9 depuradoras de poblaciones mayores de 2.000 habitantes equivalentes (medida de carga contaminante que no sólo mide el censo sino también los vertidos industriales), con antigüedades cercanas a los quince años. Son las de Aoiz, Sangüesa, Ablitas, Cortes, Fitero, Larraga, Lesaka, Ochagavía e Isaba. El coste es de 7.087.647 euros.
Además, se proyecta la construcción de tres nuevos colectores en Fontellas, Oteiza-Morentin-Muniain de la Solana-Aberin, y Berbinzana-Miranda, para unir estas poblaciones a depuradoras ya existentes, lo que supondrá una inversión de 4.841.971 euros.
Por otra parte, y con el objetivo de solucionar problemas de aliviados a los ríos y de inundaciones, se prevé la construcción de tanques de tormentas en distintas localidades situadas en las cuencas del Queiles (Cascante, Murchante, Tudela), del Alhama (Fitero, Cintruénigo, Corella), del Arga (Biurdana, colector Oblatas-San Jorge) y del Cidacos (Tafalla y Olite). El presupuesto para esta partida es de 30.269.250 euros.
De acuerdo con una estrategia de máximo respeto hacia el modelo de desarrollo del medio rural en este ámbito, NILSA priorizará el tratamiento biológico de aguas en poblaciones de menos de 2.000 habitantes equivalentes y más de 250. Las 15 actuaciones afectarán a las localidades de Abárzuza, Azcona, Arizala, Areso, Cirauqui, Mañeru, Ezcároz, Figarol, Labayen, Liédena, Monreal, Pueyo, Rada, Oronoz-Mugaire, Oieregi, Narvarte, Legasa, Doneztebe, Sunbilla, Tiebas, Urdax, Ziordia y Zubiri. Por otra, ha asignado una partida presupuestaria de 15 millones de euros para los núcleos de menor población. La suma de ambos conceptos asciende a 25.582.568 euros.
ZONA LIBRE DE FÓSFORO
Por otro lado, en este periodo, Navarra será declarada "zona libre de fósforo" en las depuradoras que tratan el agua de poblaciones mayores de 10.000 habitantes. NILSA invertirá casi 16 millones de euros la adecuación, que consistirá en primar la eliminación biológica del fósforo sobre la eliminación por precipitación química. La primera permite la reutilización agrícola del fango, aporta menos sales al agua y el coste de operación y mantenimiento es menor.
Un esceso de nutrientes como el fósforo o el nitrato en los ríos provoca la proliferación de algas, que absorben el oxígeno que necesitan otras especies y favorece también que las aguas tengan un color verde.
Las nueve depuradoras afectadas son las de Tudela, Cárcar-Andosilla-San Adrián, Estella, Valtierra-Arguedas, Tafalla-Olite, Bajo Arga (Funes, Falces, Caparroso, Marcilla y Peralta), Cintruénigo, Corella y Bajo Ebro (Cabanillas, Fustiñana, Ribaforada y Buñuel).
Finalmente, se invertirá 1,7 millones en la I+D+i de tratamiento del agua residual. El objetivo es fortalecer el liderazgo navarro no sólo en depuración sino también en las líneas derivadas del tratamiento del agua, en las que el resto de comunidades autónomas todavía no ha profundizado, según expuso Catalán.