Exige a ETA el fin de la violencia y reivindica para Navarra y la CAV la competencia de convocar consultas vinculantes
PAMPLONA, 18 Mar. (EUROPA PRESS) -
El coordinador de IU, Gaspar Llamazares, y los coordinadores de IUN de Navarra y del País Vasco, Ion Erro y Javier Madrazo, respectivamente, firmaron este mediodía en Pamplona la 'Declaración de Iruña', una propuesta de pacificación y normalización política de las tres organizaciones.
El documento, titulado 'La paz es el camino', integra nueve puntos, entre los que destaca la exigencia del fin de la violencia de ETA para dar paso a un escenario de diálogo, la constitución de dos meses de diálogo en Navarra y la CAV, así como la reivindicación de que ambas comunidades tengan la competencia de convocar consultas y referendums vinculantes.
Gaspar Llamazares manifestó que el proceso de paz, que consideró "irreversible", requiere de una hoja de ruta y deseó que las organizaciones políticas y sociales se pongan de acuerdo en dicha hoja. "Estamos a las puertas del proceso de paz y el principal problema para abrir la puerta es ETA, que tiene que declarar el cese definitivo de la violencia", dijo.
Con dicho anuncio por parte de la organización terrorista, añadió Llamazares en rueda de prensa, se abrirá el proceso de paz, que, una vez iniciado, advirtió, tendrá dificultades ya que "un parte ha decidido boicotear el proceso y hacerlo inviable".
Llamazares exigió así al Gobierno que "dirija" el proceso "más allá de los muros de la Moncloa". "Hay que ser discretos pero al tiempo hay que lograr una red mayoritaria que apoye y respalde el proceso de paz", dijo, para añadir que el Ejecutivo no sólo tiene la obligación de dirigirlo sino también de contribuir al aumento de apoyos.
A su juicio, el Gobierno tiene un compromiso con las víctimas del terrorismo, "que son imprescindibles en este proceso". Precisó que sólo 2.000 de las 16.000 víctimas se encuentran organizadas. También destacó que el Ejecutivo debe tomar iniciativas legislativas "desarmando la legislación española", así como otras iniciativas administrativas y de carácter penal.
Gaspar Llamazares opinó que el Gobierno debe contribuir a que "cale" la idea de que es necesaria la paz. "No es necesaria la victoria, que es amarga. Queremos la paz", afirmó. Y emplazó a las formaciones políticas a ponerse de acuerdo y avanzar hacia la pacificación.
NAVARRA Y CAV
El coordinador navarro de IU, Ion Erro, manifestó que la declaración hoy firmada "es una ofensiva democrática, frente a ofensivas nacionalistas e inmovilistas, que busca conseguir la paz y la reconciliación desde la perspectiva del diálogo".
Según dijo, en este momento político no se puede permanecer "inmóvil" y hay que ser "valiente" para impulsar propuestas. Hizo así un llamamiento al resto de partidos navarros para que elaboren las suyas.
Javier Madrazo manifestó que esta declaración sienta las bases para alcanzar la pacificación. A su juicio, son dos las claves para la paz: por un lado, el cese de la violencia de ETA y por otro, que el Partido Socialista reconozca el derecho que asiste a las sociedades vasca y navarra a decidir su futuro.
"Si la izquierda abertzale y el Partido Socialista asumen estos dos principios estaremos en las puertas de alcanzar la pacificación y la normalización política", señaló.
Para Madrazo, actuaciones judiciales contra dirigentes de la ilegalizada Batasuna "no ayudan" al proceso de paz, "como tampoco ayuda la 'kale borroka' o las campañas de extorsión y de amanaza por parte del mundo de ETA", dijo. Pidió así a la izquierda abertzale y al Gobierno "gestos de distensión y no de confrontación".
A su juicio, existen "sectores de la Justicia vinculados al PP que no están interesados en favorecer el proceso de paz y que quieren entorpecerlo". "Es importante que todas las fuerzas políticas que estamos por el proceso de paz y el conjunto de la ciudadanía tomen conciencia para fortalecer una posición favorable a la paz frente a los sectores resistentes al proceso", opinó. NUEVE PUNTOS
El primero punto de la Declaración de Iruña señala que es necesario un escenario de "cese definitivo de toda expresión de violencia" y el segundo supone una condena del mantenimiento de la violencia, la coacción y la extorsión por parte de ETA, por lo que se exige a la organización terrorista el cese definitivo.
También exige IU a los poderes públicos la asunción de gestos previos de distensión para facilitar el proceso de paz, "como la derogación de la ley de partidos políticos y una política penitenciaria que acerque a las personas presas a sus lugares de origen".
En el cuarto punto, las organizaciones firmantes de la declaración se comprometen a trabajar para que se produzcan las condiciones adecuadas para un final dialogado de la violencia. Y muestran su apoyo al diálogo entre el Estado y quienes decidan abandonar la violencia.
El quinto punto habla de la constitución de dos mesas de diálogo democrático resolutivo, una en Navarra y otra en la Comunidad Autónoma Vasca, "en un escenario de no violencia e integradas por toda la expresión política existente en cada uno de los dos territorios".
Según añade, para la creación de las mesas se respetarán cinco principios: la defensa del derecho a la vida, dignidad humana y derechos humanos; la garantía de presencia y respeto de la pluralidad política y social; la utilización de los principios y procedimientos exclusivamente democráticos; el compromiso de desarrollo de la participación ciudadana en el proceso, con la obligación de consultar los acuerdos adoptados a las ciudadanías; así como la voluntad de adoptar acuerdos transversales.
El punto 7 reivindica el traspado a la CAV y Navarra de la competencia de convocar consultas y referendums vinculantes. Y el octavo indica que cualquier acuerdo que se pudiera adoptar y que afecte al futuro de cualquiera de las realidades territoriales que hoy existen "deberá contar con la voluntad popular expresada, de forma autónoma y diferenciada, a través de la consulta directa y democrática a la ciudadanía".
Finalmente, el texto hoy firmado reitera la apuesta de IU por un Estado federal, solidario, plurinacional, republicano y laico.
