PAMPLONA 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
La juventud de la Comunidad foral ha notado antes los efectos de la crisis económica que el resto de jóvenes españoles, aunque está siendo más atenuada que en el conjunto estatal, según se desprende de la evolución trimestral de la tasa de actividad de la población joven de Navarra, incluida en el informe del Observatorio Joven de Empleo (OBJOVEM) elaborado por el Consejo de la Juventud de España (CJE).
En concreto, según este informe, la evolución trimestral de la tasa de actividad de la población joven de Navarra indica que la actual crisis económica se notó más en el cuarto trimestre de 2008 (63,9%) que en el primero de 2009 (66,1%). No obstante, ha sido en este primer trimestre cuando ha disminuido en el conjunto del Estado (66,2%) respecto al último trimestre del año pasado (67%), informó el Consejo de la Juventud.
A pesar de ello, el descenso de la tasa de ocupación en el último año ha sido mucho menos acusado entre los jóvenes de Navarra que en el resto del Estado. De tal forma que en Navarra ha disminuido un 6,4 por ciento frente a un 11,8 por ciento. Esto muestra que, a pesar de haberse notado antes la crisis económica entre la juventud navarra, ésta está siendo más atenuada que en el conjunto estatal.
Además, la tasa de paro entre la población joven de la Comunidad foral alcanza ya el 17,7 por ciento; cuando hace justo un año, en el primer trimestre de 2008, era del 11,3 por ciento. Asimismo, en el conjunto estatal la cifra se eleva hasta el 27,4 por ciento cuando hace un año estaba en el 15,6 por ciento. No obstante, a pesar de la relativa mejor posición de la Comunidad foral, "la situación no deja de ser dramática", señalaron.
SECTORES Y CONDICIONES
La presencia de jóvenes de Navarra en el sector de la construcción disminuye drásticamente, pasando del 15,3 por ciento al 9 por ciento en el último año. Mientras que, al contrario, en el sector servicios aumenta el porcentaje: del 56 por ciento al 65,2 por ciento.
Las condiciones de empleo de la población joven de Navarra muestran una situación aparentemente de mejora, al igual que en el conjunto del Estado.
De esta forma, en Navarra han aumentado entre la población joven un 8,6 por ciento los contratos indefinidos. Mención aparte merece el aumento de la contratación indefinida de jóvenes por parte del sector público, ámbito donde se han incrementado un 30,5 por ciento. Pese a esto, la tasa de temporalidad en este sector sigue siendo muy alta debido a que únicamente el 43,4 por ciento son contratos indefinidos.
FORMACIÓN
Por su parte, ha disminuido en el último año el número de personas jóvenes ocupadas que buscan otro empleo. Así, han pasado de representar un 12,2 por ciento en el primer trimestre de 2008 a un 9,2 por ciento en el mismo trimestre de este año. Esta tendencia a la baja contrasta con el aumento que se ha producido en el resto de España.
Sin embargo, la juventud empleada de Navarra ha entendido que una de las formas más eficaces de contrarrestar los efectos de la crisis es la mejora de la formación. De tal modo que, en el último año, las personas jóvenes ocupadas de la Comunidad foral que cursan formación no reglada suponen un 21,9 por ciento del total, frente al 12,4 por ciento del total estatal. Es más, en el último año se ha incrementado un 6,1 por ciento en Navarra, frente al 0,9 por ciento del Estado.
REIVINDICACIONES
Ante esta situación, el Consejo de la Juventud de Navarra (CJN) reivindica un mayor gasto en políticas de I+D+i "para que la economía navarra sea cada vez más productiva y cree empleos más estables y de calidad".
También piden superar los déficits de formación y cualificación; mayor vigilancia por parte de la Administración y responsabilidad del empresariado en materia de salud y seguridad laboral de los trabajadores jóvenes y garantizar el acceso universal, público y gratuito del conjunto de la ciudadanía a todos los tramos educativos para evitar discriminación por motivos de origen, raza o sexo".
Además, exigen proyectar un plan de formación + empleo especialmente adaptado a aquellos colectivos más desfavorecidos; mayor coordinación entre los organismos públicos encargados de ofertar la formación a las personas desempleadas; luchar activamente contra cualquier forma de discriminación y garantizar la igualdad de oportunidades.
Por último, también creen que se debe garantizar la igualdad de salario para un trabajo de igual valor, así como una Oferta de Empleo Público, "que facilite el acceso a un empleo estable y de calidad y que acabe con la excesiva temporalidad en este sector".