PAMPLONA 2 Ene. (EUROPA PRESS) -
El director del Instituto Navarro de Salud Pública, Pablo Aldaz, afirmó hoy que la ley antitabaco que entró en vigor ayer en España era "necesaria" y tiene capítulos "muy buenos", pero al mismo tiempo advirtió de que la normativa contiene puntos que son "una auténtica chapuza".
Pablo Aldaz sostuvo, en declaraciones a Europa Press, que la ley foral del tabaco, que se aplicaba en Navarra desde hace dos años, era "mucho más coherente" que la normativa estatal y advirtió de que Navarra será "muy tranquila a la hora de aplicar la nueva ley". "Como hicimos con la ley foral, primero informamos, asesoramos y advertimos, y con eso, en la mayoría de los casos nos ha bastado, porque la sociedad es bastante más madura de lo que algunos se creen", señaló.
El director del INSP se declaró "encantado por tener una ley sobre el tabaco porque la legislación hasta ahora era muy laxa" pero consideró "un desastre el apartado que hace referencia a espacios de humo porque permite entrar a los menores en los bares de fumadores y porque no se permite fumar en los centros del trabajo".
Según Aldaz, con esta nueva normativa, "todo el cuerpo de protección a menores se desmonta automáticamente cuando se les permite entrar en los bares, cuando esto no era inicialmente lo pensado". "Hay que pedir responsabilidades a quienes lo hayan hecho así, porque es una chapuza", advirtió.
También consideró "mejorable" la regulación que hace la ley sobre el tabaco en espacios laborales. "Con esta ley se le echa necesariamente al fumador a la calle. Nosotros pensábamos que los espacios para fumadores en el trabajo no molestan a nadie, porque el no fumador no va a entrar allí, y se evita la crispación que va a haber ahora".
La ley foral prohibía la entrada de menores en los bares de fumadores y permitía espacios para fumadores en las empresas. El incumplimiento de la norma navarra ha supuesto que en dos años se hayan impuesto diez sanciones por cuestiones como vender tabaco a menores, por no señalizar las zonas de fumadores y de no fumadores, y por fumar en sitios prohibidos.
Además, Pablo Aldaz consideró que "la moratoria que se ha hecho de tres años para la publicidad en eventos deportivos, en concreto en las carreras de coches, para que en Montmeló se pueda lucir publicidad es una vergüenza". "Es incomprensible que se haga esta excepción y no se permitan otras", agregó.
Pese a las críticas a la ley, Pablo Aldaz consideró que la nueva normativa "conseguirá proteger al no fumador, ya que hasta ahora no había nadie que evitase que un no fumador tuviese que fumar obligatoriamente por entrar en un bar o por estar trabajando frente a un fumador".
Sobre las posibilidades de que la normativa contribuya a reducir el número de fumadores, Pablo Aldaz explicó que "la ley se inclina a que la gente vaya dejando de fumar poco a poco, pero eso habrá que valorarlo de aquí a dos o tres años". "Es una ley para cambiar hábitos sociales. No puedes pretender que el 31 de diciembre haya 12 millones de fumadores y el 1 de enero no haya ninguno", señaló, y agregó que la administración foral "no va a ir a perseguir al fumador con un inspector y dos guardias civiles".