La madre de Nagore Laffage asegura que pide "justicia y no venganza" ante el juicio de su hija

Actualizado: lunes, 9 noviembre 2009 13:45

La presidenta del Parlamento vasco, Arantza Quiroga, asiste en Pamplona a la última sesión del juicio

PAMPLONA, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -

La madre de la joven Nagore Laffage, Asun Casasola, reiteró hoy que espera "justicia y no venganza" ante el juicio por la muerte de su hija, un proceso que llega hoy a su fin y sobre el que dijo que si alguien aprende algo de la muerte de Nagore Laffage se da "por satisfecha".

Casasola atendió a los medios de comunicación que se agolparon a las puertas del Palacio de Justicia de Navarra, donde desde el pasado lunes se juzga al presunto asesino de su hija, José Diego Yllanes, y desde donde también aguardó a que finalice la vista a la espera de las conclusiones que se presentarán. Además, la sesión de hoy contó con la presencia de la presidenta del Parlamento vasco, Arantza Quiroga, quien quiso mostrar así su apoyo a la familia de Nagore Laffage.

En su declaración a los medios, Casasola confesó emocionada que durante el juicio se ha enterado de que su hija podía "haberse salvado" y que, por tanto, Yllanes "la mató dos veces". "Los forenses han dicho que le dio golpes contundentes, y yo pensaba que habían sido tan fuertes que Nagore estaba muerta, pero dijeron que no, que eran fuertes pero que podía haber vivido. Y después va y la estrangula con una mano sin dejar huellas".

Por ello, Casasola insistió en que Yllanes mató a su hija "dos veces", que "lo tenía todo calculado para hacer el crimen perfecto y no quería quitar su imagen de niño perfecto", y que el joven "está haciendo el gran papelón de su vida". Reiteró que "él ha matado a mi hija con sangre fría".

La madre de Nagore Laffage valoró cómo han sido para ella estos últimos días desde que hace una semana se iniciase el proceso judicial. No ha entrado en la sala, tan sólo cuando declaró ella, porque "no puedo esta ahí dentro", reconoció. "Mi hermana está destrozada por estar ahí. Los que están dentro están destrozados porque han visto las imágenes, que deben ser espantosas, yo no he visto nada y no quiero ver nada".

Casasola se reafirmó hoy de nuevo en que el alcohol "no es eximente", defendió que Nagore era "una niña con temperamento, que se enfrentaba a las cosas y él sabía que le iba a denunciar", sostuvo en relación a Yllanes.

Asun Casasola apeló de nuevo a la justicia porque dijo necesitar que el proceso termine. "En mi familia estamos saltando, cada uno va por un lado, no tengo familia desde hace dieciséis meses. No he dormido cinco horas seguidas desde entonces, estoy en tratamiento, agotada. Necesito que este juicio termine a ver si puedo retomar esta familia. No sé como será vivir sin Nagore, porque no soy consciente de que no está", dijo Casasola.

Preguntada sobre las conclusiones que hoy se presentarán en las sala de vistas, Casasola aseguró estar "perdida" ante las estrategias que se seguirán y sostuvo no saber qué dirá el acusado finalmente, aunque "lo que sí sé es que no estaba bebido y que la mató fríamente". "Yo voy a los hechos. No está loco y es una persona fría y calculadora. Tanto jurado como juez tienen que ver lo que hay, las pruebas, no quiero venganza quiero justicia", concluyó.

Finalmente, Asun Casasola agradeció a los medios de comunicación la repercusión que ha tenido el seguimiento de este proceso, "no pensaba que iba a tener esa repercusión para nada" -reconoció, y se mostró satisfecha por que la imagen de Yllanes se haya hecho pública".

"UN CASO DE VIOLENCIA SEXISTA"

Como el resto de días que ha durado el proceso, decenas de personas se concentraron frente al Palacio de Justicia, desde donde la técnica de Igualdad del Ayuntamiento de Estella y coordinadora de la iniciativa 'Lunes Lilas', Tere Sáez, leyó un manifiesto en el que afirmó que el caso que se juzga "sí es violencia de género sexista".

Sáez aseguró que la joven "fue brutalmente asesinada por ser mujer y decir que no a los deseos de Diego Yllanes", con lo que quitarle "esa denominación supone no ajustarse a la ley".

"Pedimos que se juzgue a Yllanes, no por su trayectoria, sino por lo que hizo el 7 de julio. Asesinó a Nagore, la estranguló, la golpeó con violencia e intentó esconder su cadáver parar evitar que su honor quedara manchado. Eso no es un arrebato, es un asesinato. No hay atenuante ni excusa que valga", aseveró.

Asimismo, reivindicó la memoria de Nagore, quien "tuvo la valentía de decir que no ante lo que no quería hacer y no plegarse ante quien podía tener un estatus superior", apeló.

EL SENTIR DE "LA MAYORÍA DEL AYUNTAMIENTO"

En la concentración de hoy frente a las puertas del Palacio de Justicia también participó la portavoz del grupo socialista en el Ayuntamiento de Pamplona, Maite Esporrín, quien defendió que "en todo momento" su partido ha apoyado a Asun Casasola, porque "entendemos que su petición era absolutamente justa: pedir justicia".

Por ello, indicó que "en todas las convocatorias de rueda de prensa le hemos acompañado y nuestro apoyo ha sido constante y unánime, y ése es el sentir de la mayoría del Ayuntamiento, aunque en el algún momento no se haya podido estar aquí".

Así, dijo que tras seguir el juicio y ver las pruebes se ha comprobado "la dureza del proceso y lo que Nagore sufrió, que hace pedir todavía con más fuerza justicia. Estamos convencidos de que va a ser así".