MADRID 18 Oct. (OTR/PRESS) -
La ETA aquella que los del "Proceso de Paz" decían imposible de derrotar y por tanto había que negociar con ella y a la que ahora en un giro absoluto ellos mismos declaran derrotada para seguir negociando con ella obtuvo ayer un nuevo éxito político a costa de la dignidad de todos los españoles. Una pantomima de conferencia a la que el PSE de López y Eguiguren con la aquiescencia de ZP, Rubalcaba y Blanco, ha dado un ignominioso aval y ha hecho una enésima concesión, tras la esencial y repulsiva legalización por parte de sus apéndices judiciales del Tribunal Constitucional, en la desesperada carrera por conseguir que los terroristas emitan ese comunicado que les sirva como último cartucho en las elecciones generales.
Todos deseamos y cuanto antes, ojalá mañana, que ETA desaparezca, deje y entregue las armas y se disuelva. Pero hay una enorme diferencia que marca la línea roja. Para ello, para que eso sucede, la sociedad no tiene porque pagar nada, los demócratas no deben nada, la sociedad no debe nada, las victimas no deben nada a sus verdugos. A nosotros si que se nos debe todo, toda la sangre derramada, todo el dolor causado por los asesinos. Y deben pagar por ello. El fin de Eta, esa que ahora dicen derrotada, no puede ser su triunfo y su victoria. Y lo que se pretende escenificar con esa farsa es que víctimas y verdugos son iguales y que a estos por dejar de matad se les concede la impunidad para sus crímenes y hasta se les da el trato de héroes. Que es así como quieren escribir ellos la historia. Pero esta es otra bien distinta que no vamos ni queremos olvidar. La democracia trajo a España las libertades y la amnistía de los presos políticos. ETA no la acepto. Optaron por la violencia en vez de las normas pacificas y el voto. Pretendieron imponer por el terror sus postulados. Asesinaron, secuestraron, incendiaron, extorsionaron y amedrentaron. Y fueron perseguidos por sus crímenes y detenidos y encarcelaron por ellos. Por sus crímenes. No por sus ideas. Por ellos están presos y por eso deben seguir estando. No les debemos otra cosa que sangre derramada.
Dicen que el final de ETA está cercano. Así lo quiero. Pero ha de ser un final verdadero. Su derrota. Pagar precio no sería otra cosa que su victoria. Y en esa conferencia el PSOE ya lo está pagando. Pero esta vez los españoles lo saben y no los van a aplaudir precisamente por hacerlo. Si de verdad ETA está derrotada pues que se rinda y punto. A ver si al final los derrotados vamos a ser todos nosotros y la propia democracia.