Actualizado 09/07/2011 14:00

Antonio Casado.- Rubalcaba, hora cero.

MADRID 9 Jul. (OTR/PRESS) -

Este sábado arranca la incierta aventura de Pérez Rubalcaba como candidato socialista a la Presidencia del Gobierno en las próximas elecciones generales. Con enorme expectación se espera su discurso en el Palacio Municipal de Congresos (Ifema), lugar elegido para la reunión del Comité Federal del PSOE para la solemne proclamación de su aspirante a la Moncloa.

De su discurso sabemos que está muy bien estructurado, que es de amplio espectro y que incluye aportaciones propias y ajenas. Según el secretario general del partido, y aún presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el discurso marcará "un antes y un después" en la reciente historia del PSOE.

Con muchos invitados en el auditorio, el candidato Rubalcaba expondrá el proyecto que dará forma a su causa electoral. Una causa que desea lo bastante diferenciada de la de Zapatero como para que se pueda hablar de "cambio". Y lo bastante solidaria con el Gobierno Zapatero como para que se pueda hablar de "continuidad".

Muchas horas de trabajo ha echado Pérez Rubalcaba al esfuerzo de distanciarse de Zapatero pero sin ruptura. Ya se verá después si ha conjugado correctamente los dos términos de su ecuación electoral: continuidad y cambio. Atentos a las reacciones de crítica y público que empezaremos a conocer a primera hora de la tarde del sábado.

Es la hora cero del candidato. La hora cero más uno será la semana que viene, cuando renuncie a sus cargos institucionales y se produzca su sustitución en el Gabinete. A partir de ese momento tratará de hacerse el encontradizo con Mariano Rajoy, a fin de plantear la pugna más en el terreno de los líderes que de las siglas. En ese sentido, Rubalcaba va a reclamar con especial énfasis, cuando llegue el momento, la celebración de debates televisivos cara a cara, como los que libraron Zapatero y Rajoy en las elecciones de 2008 porque aquel siempre aceptó la petición de éste, como los que no libraron Zapatero y Rajoy en las elecciones de 2004 porque éste nunca aceptó la petición de aquél.

En cuanto a las grandes líneas programáticas del proyecto que Rubalcaba expondrá este sábado, serán las que respondan a dos grandes retos: redefinir la socialdemocracia y ofrecer respuestas a los acampados del 15-M. Imprescindible conectar con los indignados, entre los que figuran los propios del "No nos falles" de 2004, y ofrecerles respuestas. Todo ello proyectado al futuro, aunque dentro y fuera de la pirámide socialista se escuchan voces que auguran para Rubalcaba el vuelo corto y apresurado de una codorniz. "Mi proyecto político es de largo recorrido y tiene vocación de continuidad para toda la Legislatura", ha dicho el candidato, a cuyo servicio ya se ha puesto Zapatero, como es lógico. Solo adelantará las elecciones si pierde el apoyo parlamentario o se lo pide el candidato.

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