Actualizado 04/03/2007 01:00

Carmen Tomás.- Desde el parqué.- Adios a los 14.000

MADRID 4 Mar. (OTR/PRESS) -

La semana ha sido terrible en la bolsa. Un día tras otro, los inversores han visto cómo se volatilizaban las ganancias acumuladas durante el año. El descenso en las cinco jornadas ha sido prácticamente del 5,5 por ciento y el IBEX ha perdido la referencia de los 14.000. No ocurría nada similar desde septiembre de 2002. Lo peor es que ha sido la tercera semana consecutiva de pérdidas y ya muchos se preguntan si será el comienzo de un descenso más profundo y generalizado. La bolsa española iba como un tiro, mejor que ninguna, y es lo que hacía pensar a los expertos que tuviera más margen para caer. Ahora sí podemos estar ante la corrección vaticinada por algunos analistas. Falta ver la profundidad de la caída, incluso si seguirá en los próximos días. Es un poco la pregunta del millón. ¿Quién se atreve? Es verdad que hay algunas empresas muy revalorizadas por haber estado sometidas a todo tipo de rumores, conversaciones, compras, revueltas. Pero también que no hay alarmas tremendas en el horizonte que hagan pensar en una caída profunda.

La principal amenaza fue la lanzada por el presidente de la Reserva Federal. Greenspan dijo hace unos días que la economía norteamericana podía entrar en recesión. El Dow Jones llegó a caer más de 500 puntos en una sola jornada. Tampoco los mercados asiáticos dieron respiro. Sin embargo, la salida a escena del actual responsable de la Reserva tranquilizó algo a los inversores. Falta saber si lo suficiente como para que la tranquilidad vuelva a instalarse en las bolsas de todo el mundo. No cabe duda de que son momentos de incertidumbre y que los nervios se han desatado en los parqués. Muchos han decidido escapar. Además, y para más inri esta semana se produjo una nueva movida en torno a Endesa. La irrupción de la eléctrica italiana Enel viene a dificultar la oferta de E.On y sobre todo a reabrir un proceso que ya dura 17 meses y que parecía tocaba a su fin con la celebración de la junta extraordinaria del 20 de marzo. Veremos porque de nuevo en este asalto ha habido de todo. Reuniones, alertas, ministros adelantando la noticia, posibles pactos o alianzas. Más de lo mismo, pero más escandaloso si cabe, ya que un 30 por ciento del capital de Enel es público. La oportunidad de que la CNMV funcione como un organismo regulador independiente es clara. De momento, ha hecho lo que debía hacer, pero faltan muchas cosas por aclarar. Tantas que el PP va a pedir más que explicaciones.

Carmen Tomás

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