MADRID 18 Mar. (OTR/PRESS) -
La semana bursátil ha tenido jornadas dramáticas. El Ibex ha perdido casi un 2 por ciento alentando los miedos a que la corrección ho haya terminado, aunque sea con altibajos. Sin ninguna duda, las mayores tensiones se produjeron el miércoles cuando los vientos racheados de Wall Street a propósito del sector de hipotecas hicieron perder a los dos grandes bancos y Telefónica 26.600 millones de capitalización bursátil. La insolvencia de las entidades norteamericanas de alto riesgo dedicadas al mundo de la concesión de hipotecas fue la chispa. El pánico a que en otros países, desde luego España, pueda pasar algo semejante hizo presa del pánico a los inversores que castigaron duramente al sector financiero español. De momento, en España avanzan la morosidad y los dudosos, aunque muy lentamente. Pero la espada de Damocles sigue ahí.
No se puede olvidar, los inversores no lo acaban de asimilar, ese mensaje nada tranquilizador sobre la evolución de la economía de Estados Unidos lanzado hace unos días por el ex presidente de la Reserva Federal. Tampoco, la evolución negativa de la bolsa china, cuyos dirigentes han decidido aprobar una ley que extienda el derecho a la propiedad privada y normas que regulen el libre mercado.
En España, ha habido rumores sobre Repsol y sobre Altadis. La posibilidad de operaciones corporativas sobre ambas. En la petrolera apuntaban a una oferta del capital riesgo a 30 euros y sobre la tabaquera hispano-francesa acercamientos de Imperial Tobacco que podría estar interesada en Altadis.
En cuanto a Endesa, y a pesar de la que está cayendo, aguanta el tipo y cierra la semana a 38,31. Los accionistas ante el lío que el Gobierno ha logrado armar con la irrupción de Enel en la escena podrían estar saliendo de Endesa. Durante los últimos días se ha hablado de la posibilidad de que Acciona esté negociando con E.On y de toda una batería de reuniones que miembros del Gobierno español estarían manteniendo con unos y con otros, sobre todo con directivos de Enel -la última en Roma entre Taguas y Conti- para apuntalar la entrada en la eléctrica española sin restricciones.
La bolsa está rara. De eso no hay duda y los miedos continúan dominando los análisis y los ánimos de los inversores. Todo el mundo espera una señal que les marque el camino. ¿Sucederá esta semana?
Carmen Tomás