- Las tropas de Milosevic utilizaron francotiradores y morteros contra la población civil y mataron a miles de personas
LA HAYA/BELGRADO, 12 Dic. (OTR/PRESS) -
El asedio a la ciudad de Sarajevo durante la guerra bosnia entre los años 1994 y 1995 causó miles de muertos. Doce años después, el Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia (TPIY) ha condenado al ex general serbiobosnio Dragomir Milosevic a 33 años de prisión, al considerarle culpable de orquestar las incursiones, con francotiradores y morteros incluidos, que originaron que cualquiera podía morir "en cualquier sitio y en cualquier momento".
En los desiguales combates murieron desde niños de dos años hasta ancianos de 80. El general Milosevic se encontraba al mando de las operaciones, según expusieron los fiscales ante el TPIY. El juez Patrick Robinson fue el encargado de leer la sentencia, por la que el militar ha sido condenado a 33 años de cárcel. "No había ningún lugar seguro en Sarajevo. Cualquiera podía morir o resultar herido en cualquier sitio y en cualquier momento", señaló el magistrado.
A Milosevic, de 65 años, se le imputan crímenes contra la humanidad y violación de las leyes de la guerra, además de cinco casos de terrorismo, asesinato y actos inhumanos durante el asedio a la capital bosnia. Y es que, según el fallo, bajo su mando las tropas del Ejército serbobosnio rodearon y tendieron una emboscada a Sarajevo durante 15 meses que concluyeron en noviembre de 1995.
Como armamento, el Ejército se sirvió de varios métodos, entre ellos francotiradores y morteros. Además, el TPIY entiende que se modificaron las bombas aéreas utilizadas, subrayando que eran las que debían usarse para un "objetivo militar".
MASACRE EN EL MERCADO
El uso de los morteros se cobró numerosas vidas entre la población civil, dejando tras de sí una cifra de muertes de miles de víctimas por hechos trágicos como el ocurrido el 28 de agosto de 1995 en el mercado Markele de la capital. En este incidente, uno de los más "horrendos", fallecieron 34 civiles y otros 78 resultaron heridos. "Uno de los policías que investigó el incidente describió lo que vio como 'el último y más profundo círculo del infierno de Dante". De esta forma, se descarta la participación de las tropas de Bosnia-Herzegovina en la masacre.
En este sentido, Milosevic "abusó de su posición y planeó y ordenó flagrantes y sistemáticas violaciones del derecho internacional humanitario", en base a una sentencia que llega dos meses después del fin del juicio, iniciado el pasado 11 de enero, y después de que el ex general se entregase el 3 de diciembre de 2004.
Para el ciudadano de Sarajevo Dzemail Cilas, la sentencia "no es suficiente". "Debería haber sido condenado de por vida", agregó. Sin embargo, el serbiobosnio Dragan Radoojkovic criticó por desmesurado el fallo contra Milosevic, a quien considera un "héroe nacional". "Es otra prueba más de que es una Corte política", lamentó, en referencia al Tribunal implicado.
MÁS PERSEGUIDOS
Por otra parte, el ministro serbio encargado de la cooperación con el TPIY, Rasim Ljajic, afirmó hoy, en respuesta a las declaraciones de la fiscal jefe de este organismo, Carla del Ponte, que su país sí está haciendo esfuerzos para capturar al general del Ejército serbobosnio Ratko Mladic y al dirigente político Radovan Karadzic.
En una radio holandesa, Ljajic aseguró que Serbia "no sigue la pista de esos fugitivos". Aunque reconoció que se han cometido algunos errores en la búsqueda de los tránsfugas, también advirtió que las acusaciones de Del Ponte no son fundadas. Ljajic afirmó que la última vez que se vio a Mladic fue en Belgrado, en febrero del pasado año, mientras que Karadzic lleva desaparecido desde 2004.
Ambos están acusados de cometer las mayores atrocidades en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Presuntamente, planearon la masacre de 8.000 hombres y niños musulmanes de la ciudad serbia de Srebrenica, además de participar en el sitio de la capital.