- Actuaban en viviendas, bancos y empresas, con un botín valorado en 450.000 euros
MADRID, 20 Nov. (OTR/PRESS) -
Nuevo golpe contra el crimen organizado protagonizado por delincuentes procedentes de la Europa del Este. La Guardia Civil ha desmantelado una banda integrada fundamentalmente por albanokosovares, con 18 detenidos en total, a los que se imputan más de 70 robos en once provincias. Utilizando medios muy sofisticados y con una estrutura jerarquizada, actuaban tanto en viviendas como en bancos y empresas, y se podrían haber hecho con un botín valorado en 450.000 euros. La Benemérita calcula que la organización podría haber obtenido 300.000 euros en efectivo y 150.000 euros en diverso material sustraído en más de 70 robos cometidos en las provincias de Málaga, Cádiz, Granada, Sevilla, Córdoba, Madrid, Cáceres, Ávila, Segovia, Guadalajara y Toledo.
La operación, denominada 'Espeto', se ha saldado con la detención de un total de 18 integrantes de la red, 11 en Málaga y 7 en Madrid, en su mayoría de nacionalidad albanokosovar, salvo un argentino y un español arrestados en Málaga. Además, los agentes se han incautado de más de 56.000 euros en metálico, cuatro vehículos, joyas, documentación falsa y numerosas herramientas y material electrónico utilizados en los robos.
Las investigaciones arrancaron a partir del análisis de la documentación intervenida por la Guardia Civil durante el último año en diversas operaciones contra este tipo de organizaciones delictivas asentadas en España, precisó el Instituto Armado en un comunicado. En ese análisis, la Guardia Civil comprobó que la organización repartía sus objetivos en tres células, una de las cuales operaba en Madrid y las otras dos en la provincia de Málaga.
ESTRUCTURA JERARQUIZADA
La organización tenía una estructura jerarquizada, empleaba sofisticados sistemas de transmisiones, inhibidores de frecuencia para neutralizar las alarmas, ropa oscura para no ser vistos por la noche, guantes y herramientas para cometer los robos. En varias ocasiones las herramientas para cometer los robos se las había proporcionado un ferretero de la localidad de Fuengirola (Málaga) que ha sido también detenido.
Cuando cometían los robos, los integrantes de la banda se dirigían a sus objetivos en vehículos alquilados y, una vez en las proximidades del lugar elegido, el grupo establecía un cordón de seguridad con sofisticados sistemas de transmisiones para alertar a los que cometían el robo de la posible presencia policial en la zona.
Mediante inhibidores de frecuencia y otros medios electrónicos desactivaban los sistemas de alarma de la vivienda, entidad bancaria o empresa y accedían a su interior forzando las puertas o realizando butrones en las paredes. Tras forzar las cajas de seguridad se apropiaban del dinero en efectivo u otros objetos de valor de fácil salida en el mercado.
El Equipo Contra el Crimen Organizado (ECO) de la Guardia Civil de Málaga ha llevado a cabo la investigación y analiza todavía una gran cantidad de documentación y material intervenido a los detenidos, ya que se sospecha que pudieran haber participado en más de 150 robos. Las investigaciones han sido dirigidas por el Juzgado de Instrucción número dos de Torrevieja (Alicante).