Crónica ETA (3).- San Gil asegura que cuando vio la pistola en la cabeza de Ordóñez pensó que era "una broma macabra"

- La presidenta del PP vasco declaró en el juicio contra 'Txapote' para el que el fiscal pide 30 años de cárcel

MADRID, 29 Nov. (OTR/PRESS) -

El etarra Francisco Javier García Gaztelu, 'Txapote', volvió a sentarse en el banquillo de los acusados. Hoy se celebró en la Audiencia Nacional el juicio por el asesinato del concejal del PP Gregorio Ordóñez en enero de 1995 en el que declaró como testigo presencial del asesinato la presidenta del PP vasco, María San Gil, que afirmó que cuando el asesino del concejal "pegó la pistola directamente a su nuca" sólo le dio tiempo a pensar que se trataba de "una broma macabra". El fiscal pide para 'Txapote' una pena de 30 años al considerar probado que asesinó a Ordóñez de forma "cruel, cobarde y a traición". Este es el último juicio al que se enfrenta el ex dirigente etarra antes de ser devuelto a Francia.

"Pegó la pistola directamente a la nuca de Gregorio", afirmó San Gil que era secretaria personal de Ordóñez cuando fue asesinado, que prosiguió su relato. "Fue un segundo, de repente yo vi la pistola me dio tiempo a pensar: menuda broma macabra, porque era impensable, no teníamos la sensación de que pudiera pasar nada de este tipo, pero inmediatamente después la cara de Gregorio se desfiguró completamente", recordó.

San Gil también apuntó que tras el disparo "la persona que le había pegado el tiro salió corriendo y yo salí detrás suyo" y relató como en su huída el asesino "se cayó, y me di cuenta de qué hacía yo corriendo detrás del asesino. Entonces, volví a entrar en el bar". La presidenta del PP vasco señaló que no podría identificar físicamente al asesino del edil y en su testimonio subrayó que Ordóñez no llevaba escolta, puesto que la Consejería de Interior lo había rechazado. En todo caso señaló que "en esos años era imposible pensar que en el casco viejo de San Sebastián viniese alguien a pegarte un tiro".

También otros testigos que presenciaron el asesinato de Ordóñez, entre los que estaban Enrique José Villar Rodríguez de Hinojosa, una de las cuatro personas que se encontraban comiendo con el concejal en el momento del atentado. Villar relató por videoconferencia que cuando le dispararon escuchó "un ruido" y, a continuación, vio a San Gil gritando y a Ordóñez en el suelo sangrando. "Ordóñez cayó muerto hacia atrás y San Gil salió detrás del asesino", afirmó.

CRUCE DE MIRADAS

Tras su testimonio San Gil abandonó la Sala, cruzando su mirada sin amedrentarse con la de 'Txapote' que le sostuvo durante unos tensos segundos la mirada. Después se incorporó al público, donde recibió múltiples muestras de cariño. A la vista acudieron también a la viuda y la hermana de Ordóñez, Ana Iribar y Consuelo Ordóñez, quienes se mostraron visiblemente emocionadas durante el juicio.

En la vista también estuvieron el portavoz de Justicia del PP en el Congreso, Ignacio Astarloa, el presidente de la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT), Francisco José Alcaraz, la portavoz del grupo municipal del PP de San Sebastián, María José Usandizaga, y el presidente de Nuevas Generaciones del PP, Nacho Uriarte. Tanto PP como AVT, además del Ayuntamiento de San Sebastián, están personadas como acusación particular.

Por su parte, el fiscal Ignacio Gordillo mantuvo su petición de 30 años de cárcel para 'Txapote' por un delito de asesinato en concurso con otro de atentado con las agravantes de premeditación y disfraz, al considerar acreditado que asesinó de manera "cruel, cobarde y a traición con un tiro en la espalda" a Ordóñez. El fiscal señaló que "a pesar del tiempo transcurrido, Gregorio sigue en la memoria de todos. Cuando ETA mata a un concejal, lo hace con independencia de su signo político", frase que cada vez que pronunció levantó murmullo de escepticismo entre el público asistente.

EL ÚLTIIMO JUICIO

Además, el representante del Ministerio Público pidió a la Sección Primera de lo Penal de la Audiencia Nacional que imponga al acusado la prohibición de acercarse durante 10 años, una vez que sea excarcelado, a la residencia de los familiares del concejal asesinado. También pidió a la Sala que se le condene a indemnizar a éstos con 300.000 euros.

Este este es el último de la retahíla de juicios a los que tenía que enfrentarse 'Txapote'. El próximo 15 de diciembre el dirigente etarra será devuelto a Francia por las autoridades españolas después de pasar casi un año en nuestro país de juicio en juicio. En este periodo, 'Txapote' ha sido condenado a 82 años de prisión por el asesinato del socialista Fernando Múgica, a 50 años por el del concejal del PP Miguel Ángel Blanco, a 29 años por el del sargento Alfonso Morcillo y a 18 años por el atentado contra una discoteca de Deba (Guipúzcoa).

Además, fue absuelto por falta de pruebas por el asesinato del edil del Partido Popular José Luis Caso y está a la espera de sentencia por un atentado contra el cuartel del Ejército en el barrio donostiarra de Loyola y por la muerte del brigada Mariano de Juan Santamaría.