Crónica ETA (2).- Ynestrillas se cuela en el juicio a De Juana y le amenaza de muerte

- Radicales de ultraderecha cortan durante una hora la calle Génova

MADRID, 27 Oct. (OTR/PRESS) -

"Juan Ignacio, mírame a la cara, mírame a los ojos, soy Ynestrilas. Mírame a los ojos porque será lo último que veas". Estas fueron las amenazas que Ricardo Sáenz Ynestrillas, hijo de un comandante de las Fuerzas Armadas asesinado por ETA en 1986 y destacado dirigente de la ultraderecha, profirió contra el etarra Ignacio de Juana Chaos durante el juicio que se celebra contra él ante la Audiencia Nacional. Pero la tensión no sólo se vivió en el interior de la sala. La Policía tuvo que articular un verdadero dispositivo de seguridad para evitar que se produjeran incidentes entre los simpatizantes del etarra e integrantes de asociaciones de víctimas que se concentraron en el exterior del edificio. Miembros de grupos de ultraderecha, que se adhieran a la protesta de las víctimas, cortaron durante una hora la calle Génova.

En un momento del interrogatorio al etarra, Ynestrillas irrumpió en la abarrotada sala y pidió a De Juana que le mirara "a la cara" porque eso sería lo último que vería. Automáticamente, después de proferir estas amenazas, el líder ultraderechista fue reducido por varios policías y obligado a desalojar la Sala por orden del presidente del tribunal, que solicitó su identificación.

Pero esta no fue la única interrupción que se produjo durante la vista. Pocos minutos después, el hermano de Ynestrillas, que también estaba presente en la sala denunció en alto: "Aquella gente está levantando el puño", en referencia al saludo que algunos familiares y amigos de De Juana estaban realizando al terrorista. Ambos fueren reducidos por los agentes de seguridad y conducidos fuera de la sala.

TAMBIÉN TENSIÓN EN EXTERIOR

A primera hora de la mañana la AVT había convocado una concentración en la Plaza de la Villa de París, a pocos metros de la Audiencia Nacional para mostrar su rechazo a una posible rebaja de la solicitud de pena bajo el lema 'La dieta De Juana: la dieta que quita las penas'. Allí unos 200 manifestantes corearon lemas como 'De Juana, muérete', 'Todos a una, puta Batasuna' o 'Viva España', profirieron insultos contra el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero y contra el Fiscal General de Estado, Cándido Conde Pumpido y solicitaron la pena de muerte.

Para evitar el enfrentamiento, las autoridades decidieron trasladar la concentración convocada por la AVT y el Foro de Ermua ante la Audiencia Nacional y que hubiera coincidido con una concentración para apoyar al etarra. Los simpatizantes de De Juana, llegados desde San Sebastián, tampoco pudieron manifestarse ante la Audiencia y fueron trasladados hasta la Plaza de Colón.

Pero aunque se evitaron los enfrentamientos entre las dos concentraciones el dispositivo policial no logró que no se produjeran algunos incidentes. Los enfrentamientos verbales los protagonizaron miembros de la AVT y radicales de la extrema derecha. De hecho durante una hora la calle Génova, donde se sitúan las dependencias de la Audiencia Nacional permaneció cortada por miembros de la ultraderecha, una acción de la que la AVT quiso desvincularse por completo. La asociación que preside Francisco José Alcaraz se negó a moverse del lugar autorizado para su concentración como le pedían los radicales que acudieron a su manifestación.