- Rajoy tampoco le preguntó por las armas en su intervención en el Congreso, que centró en la "presión" del Gobierno a los jueces
MADRID, 22 Nov. (OTR/PRESS) -
Dos días después de que las autoridades francesas confirmaran que fue ETA la que robó 350 pistolas en el sureste de Francia, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no quiso revelar qué consecuencias tendrá este hecho para la banda terrorista y en el desarrollo del proceso de paz. Ante las insistentes preguntas de los periodistas en los pasillos del Congreso, Zapatero se limitó a dar las gracias y eludió hacer ningún tipo de declaración. El presidente del PP, Mariano Rajoy, tampoco se refirió al robo de las pistolas en la pregunta que dirigió a Zapatero, y centró su intervención ante el Pleno del Congreso en criticar los "actos de presión" que el Gobierno y Batasuna ejercen sobre la actuación de la Justicia.
El pasado lunes el responsable de la Subdirección Antiterrorista de la Policía Judicial francesa confirmó en el marco de un juicio que se sigue en el país galo contra 14 integrantes del aparato logístico la autoría de ETA en el robo de armas cometido en Vauvert el pasado 23 de octubre. Dos días después del robo, que calificó de "grave y serio", Zapatero advirtió de si se confirmaba la autoría de la banda terrorista esta acción tendría "consecuencias" en el proceso de paz.
Hoy los periodistas abordaron a Zapatero en los pasillos del Congreso de los Diputados, donde se encontraba para comparecen en la sesión de control semanal ante la Cámara Baja, y le pidieron de manera reiterada que concretara cuáles iban a ser esas consecuencias de las que habló en su día. Pero el presidente del Gobierno hizo oídos sordos evitando contestar a las preguntas y se limitó a dar las gracias a los periodistas.
RAJOY TAMPOCO SACÓ EL TEMA
Y si Zapatero no quiso hablar de las pistolas y sus consecuencias, el que sorprendentemente tampoco lo hizo fue el líder del PP, Mariano Rajoy, que en sus críticas a la política antiterrorista del Gobierno ningún momento hizo referencia al robo de las armas ni a la confirmación de las autoridades francesas de la autoría de ETA.
Todo indica que esta cuestión los populares pretendían tratarla en la pregunta que su secretario general, Angel Acebes, iba a realizar a la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega. En ella el número dos del PP tenía previsto interrogarle sobre si ETA ha demostrado o no "'una clara voluntad' mediante 'actitudes inequívocas', de poner fin a la violencia", tal y como pretende verificar el Gobierno. Pero Acebes se ausentó de la sesión de control, y nadie en las filas populares retomó el tema.