El Tribunal Superior de Justicia Vasco investigará a dirigentes de PSE y Batasuna por reunirse en julio
- Admite la denuncia del PP y la querella interpuesta por el Foro de Ermua que les imputan un delito de desobediencia al Supremo
BILBAO/MADRID, 3 Nov. (OTR/PRESS) -
El lehendakari ya no es el único que puede ser procesado por reunirse con la ilegalizada Batasuna. La Sala de lo Civil y de lo Penal del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) admitió hoy a trámite la denuncia presentada por el PP y la querella interpuesta por el Foro de Ermua contra los dirigentes del PSE Patxi López y Rodolfo Ares y contra los representantes de Batasuna Arnaldo Otegi, Rufi Extebarria y Olatz Dañobeitia. A todos ellos se les investigará por un presunto delito de desobediencia al Tribunal Supremo que cometieron con la reunión que el pasado 6 de julio celebraron en el Hotel Amara Plaza de San Sebastián.
Los cinco dirigentes que participaron en ese encuentro podrían haber incurrido en un "posible delito de desobediencia respecto de la sentencia dictada por el Tribunal Supremo, ilegalizando a Batasuna". En su resolución el TSJPV dice que "todos los querellados" estaban enterados de la resolución del Supremo decretando el cese de actividades de Batasuna y aun así celebraron la reunión. Así el alto tribunal admite a trámite la querella y denuncia por posible delito de desobediencia, previsto en el artículo 556 del Código Penal, señalando que Patxi López y Rodolfo Ares se reunieron con Otegi, Etxebarria y Dañobeitia, "en nombre, estos últimos, de Batasuna, y no en suyo propio como personas físicas".
El auto, suscrito por el presidente Fernando Ruiz Piñeiro y los magistrados Roberto Saiz, Antonio García y Nekane Bolado, cuenta con el voto particular de ésta última, quien muestra su disconformidad con la admisión a trámite decidida por mayoría y se remite a los argumentos que esgrimió cuando se actuó de igual forma en la querella presentada y admitida contra el lehendakari por reunirse con Batasuna el 19 de abril de 2006.
VOTO PARTICULAR
Bolado sostiene que "el que Batasuna sea ilegal no convierte en ilegal, ni por supuesto en ilícita y delictiva, la conducta de aquel sujeto que se limita a la mera asistencia a reuniones o al trato con personas que, habiendo pertenecido al partido ilegalizado, siguen representando un planteamiento político".
Esta decisión viene a confirmar la línea que el TSJPV marcó el pasado 11 de octubre cuando también decidió iniciar la fase de instrucción por un presunto delito de desobediencia contra el lehendakari y tres dirigentes de Batasuna: Otegi, Juan José Petrikorena y Pernando Barrena, por la reunión que mantuvieron el pasado 19 de abril. Estos contactos se enmarcaron en la ronda de reuniones del Gobierno vasco con las distintas fuerzas políticas, en las que el lehendakari incluyó a la ilegalizada Batasuna.
Uno de los directamente afectados por la decisión del TSJPV, Rodolfo Ares, aseguró que tanto él como Patxi López se encuentran "tranquilos" ya que están totalmente convencidos de que al reunirse con Batasuna no cometieron "ninguna ilegalidad". "Nos hemos reunido con personas, representantes de la izquierda abertzale que tienen todos sus derechos civiles y políticos vigentes, para decirles lo que pensábamos, lo que es necesario para que avance el proceso de paz y que si quieren, tienen la posibilidad de defender sus posiciones a través de la política, respetando las reglas del juego", apuntó Ares que acusó al PP de buscar una "democracia carcelaria" en la que quienes no compartan sus criterios acaben "en la cárcel".
HAY QUE VER COMO TERMINA
Y desde el Gobierno se limitan a mostrar su respeto ante las decisiones judiciales. La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, manifestó hoy el "máximo respeto" y por tanto rehusó hacer "comentario alguno" sobre la decisión del TSJPV, aunque sí quiso dejar claro que una cosa es admitir a trámite una demanda o una querella, y otra es lo que el proceso judicial finalmente "vaya a determinar".
El presidente del PP, Mariano Rajoy mostró su satisfacción con la decisión del TSJPV "porque en un país normal y democrático no se puede reunir nadie con los dirigentes de una organización que ha sido declarada ilegal y organización terrorista", sea o no dirigente político. Además Rajoy destacó que esta decisión refuerza el Estado de Derecho porque refuerza la ley, que está "por encima de todos".
En esta misma línea, el secretario general del PP vasco, Carmelo Barrio, pidió hoy que "nadie vea" actitudes "antisocialitas" en la denuncia presentada por el encuentro entre representantes del PSE y Batasuna, sino "actitudes en favor del cumplimiento de la ley y las sentencias" judiciales, ya que "establecer foros de encuentro con Batasuna hoy es hacerlo con ETA".
Más lejos fue el portavoz del Foro de Ermua, Mikel Buesa, que llegó incluso a pedir la dimisión de López. A su juicio tras la decisión del TSJPV el secretario general del PSE debería abandonar su cargo "para no perjudicar a su partido ni a sus electores", de la misma manera que debería haberlo hecho Ibarretxe "si fuera un político decente". También señaló que la decisión del tribunal era "esperable" y supone confirmar una doctrina "perfectamente acorde con la ley" de un tribunal que actúa "sin tener en cuenta presiones políticas".