- Un informe sobre la infancia en España revela una recuperación de la natalidad entre las españolas
MADRID, 19 Nov. (OTR/PRESS) -
Un informe sobre la infancia presentado el pasado viernes por la secretaria de Estado de Servicios Sociales, Familias y Discapacidad, Amparo Valcarce, desvela un incremento notable del número de familias que conviven bajo las fórmulas no convencionales. Así por ejemplo desde el año 1991 al año 2001 el número de niños que viven con parejas de homosexuales pasaron de 600 a 2.200. En conjunto en ese período se ha registrado un aumento significativo de la población infantil, debido fundamentalmente al incremento de la natalidad entre las españolas y a las inmigrantes, que o bien ya venían con hijos menores o han sido madres aquí.
El estudio 'La infancia en cifras', presentado el pasado viernes con motivo del Día Internacional de la Infancia que se celebra mañana, hace una radiografía de los cambios en los modelos de familia en los últimos años, en los que en conjunto se ha registrado una fuerte disminución de los niños que viven en el seno de un matrimonio convencional y el aumento de los que viven con parejas de hecho o familias monoparentales.
Sobre estos últimos apartados, llama la atención los datos en torno a los niños con padres homosexuales, al haberse multiplicado casi por tres. En concreto se ha pasado de un total de 600 en el año 1991 a 2.200 en 2001, una cifra que el Gobierno estima aumentaría en los años siguientes y de los que el informe no ofrece datos.
En el mismo sentido, se ha multiplicado por tres el número de niños que viven en núcleos monoparentales, al pasar de 350.000 a más de un millón. De manera paralela, se ha registrado una disminución de los niños que viven en el seno de un matrimonio convencional, al pasar de un 92 por ciento en 1991 a un 82 por ciento en 2001.
En conjunto, el informe pone de manifiesto que desde el año 1999 se ha vivido un incremento de las tasas de natalidad y fecundidad entre las españolas. De manera paralela se ha registrado una entrada importante de extranjeras con hijos menores de edad o que han tenido niños en España, lo que ha provocado que entre 2001 y 2005 el grupo de menores haya aumentado en 300.000 individuos.
Y es que en los últimos seis años la incorporación de la maternidad de una fracción importante de mujeres nacidas en los años 60 y 70 unido a los niños españoles de madres extranjeras ha levantado la tasa bruta de natalidad casi un punto y medio respecto a la década de los 90 (10,60 por mil habitantes en 2004) frente al 9,20 del año 1998. Las comunidades que tienen una tasa de natalidad más elevada son Ceuta, Melilla, Murcia y Andalucía mientras que Asturias, Galicia y Castilla y León son las que lo tienen más bajos.
Otros datos de interés del informe es que España mejora a los países de la UE en cuanto a la escolarización de los menores de tres años, que los niños españoles tienen unos índices muy bajos de mortalidad (en torno a cuatro por cada mil nacidos en menores de un año) y que los índices de morbilidad -enfermedades- son "óptimos".
DULCES Y EMBUTIDOS
Peores datos arrojan los hábitos de alimentación: la mayoría come dulces a diario y toma embutido varias veces por semana, lo que explica la aparición de obesidad en niños y adolescentes. En cuanto a los hábitos culturales y de ocio, ocupa el primer lugar sin duda en todas las franjas de edad la televisión, aunque a medida que los chicos van creciendo se incorpora el consumo de revistas, Internet y ya más mayores, la radio y los diarios. El hobbie preferido por los adolescentes es divertirse con sus amigos.
El estudio recoge además la tendencia en relación a los malos tratos en el ámbito familiar, que, según los datos recogidos entre los años 2001 y 2005, aumentan, con especial incidencia entre los menores de trece años. En el año 2001 se registraron 1.162 maltratados mientras que en el 2005 hubo 2.960 casos.
Igualmente, en estos años se ha registrado un aumento de los jóvenes de entre 16 y 19 años que compaginan los estudios con un trabajo remunerado al pasar en cinco años de un 15 a un 28 por ciento entre los chicos y de un 21 a un 38 por ciento entre las chicas.