- La condenada intentó suicidarse en la cárcel, la semana pasada, tras conocer la denegación de su indulto
HUELVA, 13 Nov. (OTR/PRESS) -
La madre de Saray Castillo, Catalina Marín, iniciará el próximo viernes una huelga de hambre y sed. Catalina tomó esta decisión tras conocer que su hija, condenada a 15 años de cárcel por el asesinato de un hombre que, según ella, intentaba violarla, intentó suicidarse en la prisión de Córdoba el pasado viernes al saber que el indulto solicitado para su caso, había sido denegado.
El abogado que defiende esta causa, José Mariano Trillo, indicó que la madre de su defendida "ha pedido iniciar una huelga de hambre indefinida" y además aseguró que "está dispuesta a morir por su hija". Catalina pidió el indulto para su hija acompañado de 5.000 firmas, el pasado 17 de enero, petición que se producía después de que los recursos de la sentencia llevados al Tribunal Supremo no obtuvieran el resultado esperado por la defensa de la joven, ya que la petición fue rechazada hace un mes por el Consejo de Ministros.
Ahora, el abogado de Saray denuncia que "el propio jurado popular que juzgó a Saray Castillo pidió en el punto quinto de su veredicto, la petición de indulto para la acusada", por lo que considera que la denegación del Consejo de Ministros "no es legal", razón por la cual la defensa de Saray ha presentado un recurso ante el Tribunal de lo Contencioso-Administrativo. Trillo considera que este asunto "tendrá mucho peso porque nunca se había planteado en España", así, apuntó que el caso irá posteriormente al Tribunal Constitucional y después al Tribunal Europeo de los Derechos Humanos, donde "seguro que nos dan la razón".
INTENTO DE SUICIDIO
La madre de la joven Saray Castillo ha tomado la decisión de comenzar una huelga de hambre después de conocer el intento de suicidio de su hija en la prisión de Córdoba, donde se encuentra cumpliendo la condena de 15 años que le fue impuesta tras el juicio. Saray intentó, el pasado viernes, cortarse la venas con una lata de refresco, por lo que ahora se encuentra en una celda de aislamiento.
Los hechos por los que se condenó a Saray tuvieron lugar en 2003, cuando la joven, que tenía entonces 18 años, residía en la localidad de Rosal de la Frontera (Huelva). Al parecer, Saray, que conocía a F.M.R, de 34 años, desde hace un mes, fue llevada, según ella, apuntada por una pistola y bajo amenazas de muerte hasta su casa. Asimismo, la procesada aseguró que la víctima intentó violarla y que, además, llegó a propinarle "una paliza" en el dormitorio, no obstante, ni los agentes de la Guardia Civil ni los forenses encontraron signos de algún tipo de agresión o de pelea.
Cuando F.M.R. se encontraba tumbado boca arriba, sobre su cama, la procesada, a horcajadas, le clavó en el pecho y a la altura del corazón el cuchillo que previamente había escondido en uno de los calcetines que vestía. Por ello, Castillo fue condenada a 15 años de cárcel y a pagar 200.000 euros de responsabilidad civil.