Actualizado 20/10/2006 00:21

Crónica Medio Ambiente.- Mariscadores alertan de que ceniza en el banco de Combarro está acabando con parte del molusco

- Estiman que este material procedente de los montes afectados por los incendios, ha causado la muerte del 20% del marisco

PONTEVEDRA 19, (OTR/PRESS)

Los mariscadores del fondo de la ría de Pontevedra han detectado la aparición de restos de ceniza en el banco marisquero de Combarro, una ceniza que creen procede de los montes afectados por los incendios y que se ha arrastrado a través de los cinco riachuelos que desembocan en la zona. Los pescadores estiman que este fenómeno ha causado ya la muerte del 20 por ciento del molusco.

El fenómeno, si bien es un perjuicio en cualquier momento para los mariscadores, se agrava de cara a la campaña navideña puesto que, según explicó el patrón mayor de la cofradía de San Telmo, Miguel Pazos, se ha afectado principalmente la almeja fina "de menor tamaño".

Según explicó Pazos, los primeros síntomas de este arrastre de ceniza, tierra "negra" y restos vegetales comenzaron a detectarse a primera hora de la mañana, durante la jornada de marisqueo, y se ha agravado en las últimas horas debido al incremento de las lluvias. Pazos explicó que en el banco marisquero de Combarro la capa de sedimento ronda entre los 10 y 15 centímetros, lo que ha provocado que "los mariscadores se enterraran en el fango".

EXTENSION A OTROS BANCOS

El patrón de la cofradía manifestó su temor de que este fenómeno se extienda a otros bancos marisqueros como el de Ameixal, en Lourido, que podría quedar afectado por cenizas arrastradas por el río Lérez y adonde los mariscadores esperan acudir a faenar el próximo lunes. No obstante, Pazos explicó que el mal tiempo y la fuerza del mar de fondo está provocando que estos restos se impulsen a tierra, en la zona de pleamar, que no perjudica a los mariscadores.

Para la próxima semana esperan determinar con más precisión el grado de afección del temporal y de la posible aparición de más restos de ceniza. No obstante, el mariscador esbozó la posibilidad de que el origen de la mortandad en los bancos sea el exceso de agua dulce, debido a las lluvias, una circunstancia "propia de esta época", según dijo.

Contenido patrocinado