- Su informe elogia a Siria y Jordania por mantener sus fronteras abiertas ante la llegada de desplazados
LONDRES, 24 Sep. (OTR/PRESS) -
Amnistía Internacional publicó hoy el informe 'Huyen por millones: La crisis de refugiados en Irak', en el que expone la crítica situación de los refugiados iraquíes, cuya cifra aumenta diariamente en 2.000 personas. Así, son ya 4 millones los iraquíes desplazados de sus hogares por causa de la violencia que asola su país. Según este informe, actualmente está empeorando la situación y ya constituye la crisis de desplazados que crece con mayor velocidad en el mundo. En este sentido, Amnistía Internacional elogia a los gobiernos de Siria y Jordania por mantener la apertura de la mayoría de sus fronteras, mientras acusa a otros Estados de contribuir muy poco en ayuda de estos refugiados.
"El mundo lleva mucho tiempo pasando por alto la desesperada situación humanitaria de la población iraquí desplazada". Se trata de la denuncia que Amnistía Internacional ha plasmado en su informe 'Huyen por millones: La crisis de refugiados en Irak', publicado hoy. Según la ONG, la comunidad internacional no está afrontando como debería la espiral en la que ha entrado la crisis de los refugiados iraquíes, que se desplazan a otros países huyendo del todo tipo de violencia que acecha su país.
De esta forma, reprocha a algunos Estados no sólo que no ofrezcan la ayuda a los desplazados iraquíes, si no que les acusa de tomar "medidas negativas", como devolver a Irak a solicitantes de asilo rechazados, cortar la ayuda a aquellos a los que se le ha negado el asilo o, incluso, revocar la condición de refugiados de algunos iraquíes. Así lo señala Malcolm Smart, director del Programa Regional para Oriente Medio y el Norte de África de Amnistía Internacional.
Al mismo tiempo, el informe aprovecha para elogiar a Siria y Jordania por mantener la mayoría de sus fronteras abiertas hasta la fecha. Sin embargo, achaca a la falta de ayuda de otros países el hecho de que tanto el gobierno sirio como el jordano estén reforzando los controles fronterizos y cortando las principales vías de escape de las personas que huyen de la violencia. Este aumento de medidas para disminuir el número de refugiados en ambos países responde así a que cargan con demasiada responsabilidad ante esta situación. Siria acoge ya a 1,4 millones de refugiados, mientras que en Jordania se encuentran ya 500.000. Además, otros 2,2 millones permanecen aún en Irak, de forma que la cifra total de refugiados alcanza ya los 4 millones, cifra que aumenta en 2.000 personas diarias.
Por todo ello, Amnistía insta a los gobiernos sirio y jordano a que mantengan sus fronteras como lo han hecho hasta ahora, mientras que pide al resto de Estados a prestar mayor asistencia bilateral, para cubrir las necesidades sanitarias, de escolarización y de cualquier otro tipo de las personas refugiadas. Asimismo, demanda más ayudas para permitir que las ONG's continúen con su labor humanitaria a los iraquíes necesitados.
LENTITUD EN EL REASENTAMIENTO
Además, Amnistía Internacional critica en su informe la lentitud con la que se produce el proceso de reasentamiento de las personas más vulnerables entre la población iraquí refugiada en Siria y Jordania, incluyendo a las víctimas de abusos y tortura. Los datos señalados hablan por sí mismos ya que, si en 2003 (cuando EEUU derrocó el régimen de Sadam Husein) fueron asentados 1.425 refugiados, en el año 2006 lo fueron tan sólo 404, teniendo en cuenta que, en estos tres años, la cifra de refugiados aumentó en un 50%, según datos de ACNUR.
Para resolver este problema, la ONG insta a la comunidad internacional a "compartir la responsabilidad reasentando a iraquíes, especialmente a los más vulnerables, de forma más expeditiva, para aumentar las cuotas generales de reasentamiento en terceros países". En este sentido, Malcolm Smart concreta que este aumento de la ayuda debería ser aún mayor desde aquellos estados que aportan efectivos a la Fuerza Multinacional, liderada por Estados Unidos, que deben "hacer más para aliviar la difícil situación de personas que han tenido que dejar su hogar a causa de la violencia".