Crónica Suceso.- Detenido el hombre que roció a su mujer con ácido en una calle de Madrid

- La víctima, que sufre quemaduras profundas en el diez por ciento de su cuerpo, se encuentra estable y con pronóstico reservado

MADRID, 4 Sep. (OTR/PRESS) -

La Policía Nacional ha detenido en Parla (Madrid) al hombre que ayer rociaba a su mujer con un producto químico corrosivo en una céntrica calle de la capital. El arrestado, Adrián U. de 43 años y al igual que su mujer de nacionalidad rumana, fue encontrado en una zona industrial de la localidad madrileña, donde, al parecer, pretendía esconderse. Por su parte, la mujer, que sufre quemaduras profundas en el diez por ciento de su cuerpo, se encuentra ingresada en el hospital de La Paz, con pronóstico reservado "pero estable", según el informe médico.

La detención se llevó a cabo a las 22.30 horas de ayer en la calle Fuente de Parla, zona cercana a unos almacenes, donde el detenido pretendía ocultarse. Según las primeras investigaciones, el agresor y la víctima estaban casados y no existen denuncias por malos tratos ni en España ni en su país de origen. Tampoco hay antecedentes penales. El arrestado ya pasó a disposición judicial.

El suceso tenía lugar ayer en la Plaza de los Reyes Magos, en el distrito madrileño de Retiro, cuando, según cuenta el hijo de la víctima, su padre vertía el contenido de una botella sobre la mujer, lo que le provocó numerosas quemaduras leves y profundas, que afectan al diez por ciento de su cuerpo, especialmente a cara, manos y tórax, aunque también tiene afectada una pierna. Tras los acontecimientos, el agresor se dio a la fuga tras forcejear con su hijo.

Un equipo del Samur-Protección Civil se trasladó al lugar de los hechos donde fue tratada con difotenina, una sustancia que reduce la penetración del ácido corrosivo en la piel, por lo que la gravedad y la profundidad de las heridas se hace menor. Posteriormente fue trasladada al Hospital de La Paz donde se encuentra ingresada "con pronostico reservado pero estable".

TESTIGOS AFECTADOS

Durante el suceso, no sólo la mujer se vio afectada por el producto corrosivo, sino también algunos de los testigos que pasaban por la zona. Así, una de las vecinas de la zona, comentó cómo al pasar vio en un principio "nada más que al chico apoyado en un coche y llorando". "He olido el ácido y he visto al chico apoyado porque le dolía muchísimo las piernas y no podía caminar, tenía una zapatilla de deporte quitada", relató, refiriéndose al hijo de 19 años de la pareja, que también tuvo que ser trasladado al Gregorio Marañón.

Asimismo, recibió asistencia otra mujer, de 45 años y vecina de la víctima, que se vio salpicada por algunas gotas del producto abrasivo, pero que fue dada de alta en el lugar debido a que las heridas eran muy leves y superficiales.