Actualizado 17/11/2006 16:19

Crónica Vivienda.- El 42% de los españoles no está satisfecho con su casa

- Casi el 85% de las viviendas de nuestro país han sido reformadas en los últimos diez años

MADRID, 17 Nov. (OTR/PRESS) -

La famosa expresión 'Hogar dulce hogar', ya no es lo que era. Casi la mitad de los españoles no está satisfecho con el lugar donde vive que encima tiene que pagar en cómodos plazos. Los aspectos que más valoran los españoles a la hora de calificar su vivienda ideal son el disponer de una amplia cocina y habitaciones de gran tamaño. Para poder residir en la morada ideal, cada vez son más los españoles se deciden a acometer reformas en sus propiedades. Así, casi el 85 por ciento de las viviendas en España han sido reformadas en la última década.

El 42% de los españoles considera que no habita en la vivienda que le gustaría tener sino en la que puede pagar durante décadas. Peor lo tiene otro 9% que se declara completamente insatisfecho con el hogar donde reside en la actualidad. Así lo confirma el segundo informe 'La vivienda que buscamos' del BPB Iberplaco que asegura además que los tinerfeños y los sevillanos son los españoles más satisfechos con sus casas frente a barceloneses y bilbaínos que son los más descontentos.

La vivienda ideal de los españoles es un piso situado en el núcleo urbano (68,9%), aunque ello suponga disponer de menos metros útiles de la vivienda, y que dispone de una amplia cocina (3,4 sobre 4) y espaciosas habitaciones (3,1 sobre 4).

La situación de insatisfacción respecto al lugar donde viven ha llevado a muchos a decidirse por las reformas como única forma de acercarse a modelo ideal de domicilio. Así el 85% de los pisos españoles se ha visto reformado en alguna medida en los últimos diez años, ascendiendo este porcentaje al 90% en el caso de Madrid.

En un contexto económico de alto endeudamiento el 76,1% de las reformas llevadas a cabo en los últimos diez años por los españoles se costearon a partir de fondos propios y sólo un 19% mediante créditos o hipotecas.

El incremento del número de reformas se ha visto impulsado por el mal estado de las viviendas, una circunstancia que ha estado presente en el 43% de las mejoras acometidas, así como por necesidades de modernización (32,60%). El resto de las causas de reforma fueron la mejora de la vivienda, que sólo motivo en la última década el 4,30% de las reformas, la comodidad (4,30%) y la estética (3,60%). Las reformas más frecuentes son los cambios de instalaciones básicas (48,6%), de sanitarios (48%) y el alicatado de baños o cocinas (45%).

LOS EXTRANJEROS COMPRAN MENOS

Pero no solo los españoles están descontentos con el sector inmobiliario español, los extranjeros también han podido comprobar en los últimos años como adquirir un piso en España es más caro que hacerlo en otro lugar del mundo sin que este incremento de precio suponga un beneficio de ningún tipo.

Así, la inversión extranjera en inmuebles españoles ha descendido un 16,2% en lo que va de año manteniéndose la tendencia iniciada en 2005 que supone un incremento de la inversión española en el extranjero frente a una disminución del dinero que se ingresa en nuestro país por la compra de vivienda.

Pese a la desaceleración que se ha producido en el crecimiento del precio de la vivienda en España durante los últimos meses, llegando a situarse en incrementos inferiores a los dos dígitos por primera vez en cinco años, la habitual compra de inmuebles en España por parte de ciudadanos extranjeros, principalmente en las zonas costeras, se está viendo frenada por los altos precios de la vivienda.

Por el contrario el buen momento que vive la economía española está permitiendo una cada vez mayor inversión española en el extranjero en forma de bienes inmuebles. Más aún, el gasto en la compra de viviendas en el extranjero hasta agosto de 2006 ya triplica el total desembolsado en todo el año 2002 (372 millones de euros), mientras que en el capítulo de compras de viviendas en España desde el exterior, la cantidad desembolsada en el el primer semestre de 2006 sólo supone el 50,9% del total invertido en aquel año (6.036 millones de euros).

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