MADRID 11 May. (OTR/PRESS) -
Dice doña Carme Chacón, ministra de Defensa y puede que candidata a disputar a Rubalcaba las primarias por la sucesión de Zapatero, encabezando las listas de las próximas elecciones generales, que aquí van a pasar cosas "maravillosas". No especificó más en el mítin en Tomelloso donde soltó tan desconcertante noticia. ¿Maravillosas para ella, que está pidiendo apoyo a los secretarios de las federaciones socialistas? ¿Maravillosas para el PSOE, suponiendo que la señora Chacón se imponga a un Rubalcaba de quien dicen que cada día se distancia un poco más? ¿Maravillosas para España? Y en este último caso: ¿en qué sentido? Hay que urgir a la señora ministra-candidata para que precise, puesto que los ciudadanos de este país, con tanto día negro en las bolsas, con tan desastrosas cifras de parados-con-rostro, con tanta ramplonería institucional, con tanta bronca jurídica, estamos deseosos de buenas noticias, sobre todo, más que si lo son particularmente para doña Carme, si nos afectan a todos.
Pero la señora ministra, a quien por cierto adornan buenas cualidades políticas, aunque muchos las desconocen por su pertinaz manía de no hacer declaraciones a la prensa, parece haber decidido no dar explicaciones. Ella, a sus mítines, a competir en número de asistentes y en el 'aplausómetro' con su futuro rival, el hoy vicepresidente primero del Gobierno. De momento, ni siquiera ha confirmado, más allá de lo que va trascendiendo de sus cenáculos y mentideros privados, que vaya a concurrir a las primarias: aún no tenemos, los electores y contribuyentes, derecho a enterarnos de sus planes... ¿particulares?. Unas primarias que, por cierto, los veteranos, como Felipe González o Guerra, desaconsejan en estos momentos y que Zapatero, cual oráculo de Delfos, colocado 'supra omnia', ni apoya ni desdeña.
Si ella sabe administrar sus tiempos y dosificar un poco más sus silencios, por Carmen Chacón pueden pasar muchas cosas relacionadas con el futuro de este país. De lo que no estoy tan seguro es de que sean cosas en su totalidad maravillosas. Escéptico que es uno...